Carlos Torres Piña, secretario de Gobierno de Michoacán, fue designado como fiscal general del estado para un periodo de nueve años.
La semana pasada Adrián López Solís presentó ante el Congreso de Michoacán su renuncia, aunque inicialmente anunció que sería efectiva a partir del 20 de agosto, pero la adelantó.
Como propuesta de nuevo fiscal, el gobernador Alfredo Ramírez Bedolla presentó una terna compuesta por Mauricio Wilfrido Cruz Navarrete; Carlos Torres Piña y Salvador Sánchez Suárez.
En sesión extraordinaria, el Congreso de Michoacán eligió con 39 votos a Carlos Torres Piña como fiscal, cargo en el que estará hasta el 2034.
Este lunes Torres Piña asumió como fiscal y en su primer discurso aseguró que buscará conformar un grupo fuerte que responda a la exigencia de justicia de los michoacanos.
“Si bien es cierto que hay muchos retos en la entidad de diferente índole, por supuesto que la procuración de justicia es una de las demandas principales de la ciudadanía”, aseguró.
Para sus primeros meses como fiscal, adelantó que el plan de trabajo buscará que haya coordinación interinstitucional con dependencias relacionadas con la seguridad y la procuración de justicia, la participación ciudadana, la implementación de inteligencia y la modernización tecnológica. En seis meses presentará un nuevo plan.
El cambio de fiscal en Michoacán ocurre cuando la entidad se encuentra en el top ten de las más violentas por el número de homicidios dolosos y el surgimiento de un nuevo grupo de civiles armados, el "Ejército Purépecha de Libertad Michoacana”.
