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Municipios fronterizos alistan albergues a horas de la llegada de Trump

Alcaldes de ayuntamientos como Tijuana y Matamoros también se preparan con alimentación y hasta operativos ante la posibilidad de que el republicano cumpla su amenaza de las deportaciones masivas.
vie 17 enero 2025 01:08 PM
Chihuahua
A ciudades como Ciudad Juárez llegan entre 100 y 150 migrantes por día.

Gobiernos de municipios fronterizos se preparan con albergues, alimentación y seguridad en caso de que Donald Trump cumpla su amenaza de deportar masivamente a migrantes desde el día uno de su administración, el próximo lunes.

En ayuntamientos de Tamaulipas, Chihuahua, Nuevo León y Baja California ya se tienen listos espacios provisionales de hasta 600 personas para recibir a migrantes, ya sea mexicanos o extranjeros, que pudieran ser expulsados de Estados Unidos a nuestro país.

Hay preocupación y un planteamiento común: que la Federación los apoye para poder operar dichos espacios y dar una atención adecuada a los migrantes.

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Incluso, en Tijuana, Baja Califoria, se declaró emergencia, aunque su presidente municipal, Ismael Burgueño, asegura que es sólo para estar preparados.

“Es un término administrativo, que contempla el propio reglamento para prevenir, por si acaso sucediera”, comentó Burgueño en entrevista.

El pasado 13 de enero, el cabildo de Tijuana aprobó la declaratoria, con la que se autoriza al secretario de gobierno y dependencias locales para suscribir contratos y realizar adquisiciones necesarias que estén relacionadas con la situación atípica que pudiera darse con la llegada de migrantes.

En la era de Joe Biden llegaron a Tijuana diariamente entre 100 y 150 migrantes de origen mexicano y otras nacionalidades. Sin embargo, de cumplirse el plan de deportación masiva, esa ciudad tendría un incremento considerable de su población temporal.

“El 92% que pudieran ser deportados llegarían a Tijuana y el 8% a Mexicali, entonces estamos trabajando organizándonos de manera preventiva”, destacó el alcalde.

En otros municipios de Chihuahua y Tamaulipas también ya se preparan aun cuando no serían el primer destino al que podrían ser enviados los migrantes.

Roberto Lucero, alcalde de Casas Grandes, Chihuahua, afirmó que debido a la posible deportación masiva, en varios municipios del estado se han instalado albergues, entre ellos el que él gobierna.

“A todo el país nos va a afectar lo que pueda hacer el vecino país de Estados Unidos. Nosotros estamos a tres horas de El Paso, claro que nos va a afectar, pero estamos en la tercera etapa del albergue a la espera del recurso”, refirió del centro que alojará a más de 100 migrantes.

El gobernante emanado del PAN-PRI-PRD recuerda que en 2017, durante el primer periodo de Trump en Estados Unidos, a pesar del discurso antiinmigrante no se sintió tanto el efecto en las deportaciones en su municipio.

“No lo resentimos nosotros, creo que no fue lo que pueda pasar esta vez o lo que él está tratando de hacer, aunque esperamos que tenga algunas consideraciones con la mano de obra mexicana que en Estados Unidos es importante para ellos”, destacó.

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Iván Rodelo Espejo, alcalde de Ahumada, Chihuahua, municipio cercano a Ciudad Juárez, compartió que alistan un albergue para atender a cientos de migrantes.

“Tenemos planes y pláticas con el gobierno federal para instalar un albergue, para atajar un poquito la situación que nos preocupa y que está muy próxima”, aseguró.

El albergue tendrá capacidad hasta para 300 personas, lo que representa 10 veces al que hoy tienen instalado en el DIF municipal. Con alrededor de 42 millones de pesos se espera instalar el sitio que dará alojamiento y alimentación a las decenas de migrantes que regresen a su país de origen.

“Ya podremos atajar un poquito la problemática que se nos viene”, dijo.

Mientras el recurso del gobierno federal llega y puede ejercerse, el municipio prevé instalar albergues temporales en gimnasios y ”con lo que se tenga” para recibirlos.

Claro que estamos preocupados por eso se habló con el gobierno federal y se llegó al acuerdo”
Iván Rodelo Espejo, presidente municipal de Ahumada.

En el caso de Madera, Chihuahua, ya se construye una casa para el migrante, la cual tendrá capacidad de recibir hasta 600 personas.

“Será servicio de hospedaje, alimentación, estadía, también va a fungir como tipo guardería de los infantes que lleguen, es un espacio grande con espacios recreativos. Está en un municipio serrano donde las condiciones climáticas son extremadamente bajas”, afirmó el alcalde Arnoldo Jaquez Pérez.

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Migrantes no mexicanos serán enviados a CDMX

El alcalde de Matamoros, Tamaulipas, José Alberto Granados, afirmó que a los connacionales se les albergará en instalaciones del municipio, mientras que los migrantes de otras nacionalidades serían enviados a la Ciudad de México.

“A los connacionales se les dará la oportunidad de pasar al refugio temporal,y con migrantes extranjeros, Relaciones Exteriores se hace cargo directamente de ellos en la Ciudad de México y de Ciudad de México se hace el traslado a sus ciudades de origen”, explicó.

La alcaldesa de Abasolo, Tamauipas, Yazmín Saldaña explicó que en su municipio se preparan con albergues, fuentes de empleo temporal y apoyos alimentarios para los migrantes que arriben en las próximas semanas.

“Tenemos albergues habilitados por las bajas temperaturas, pero esos también podrían funcionar como refugios temporales”, comentó.

Para otros alcaldes hay todavía esperanza de que las amenazas de Trump sólo hayan sido parte de su campaña electoral y confían en que no se traduzca en decenas o cientos de deportaciones diarias.

Nataly García Díaz, alcaldesa de Gustavo Díaz Ordaz, Tamaulipas, confió que Trump se mantenga como uno de los presidentes de Estados Unidos que menos migrantes deporte, como lo fue tras su primera gestión.

“Trump ha sido uno de los presidentes que menos migrantes ha deportado, el que más lo hizo fue Bush, pero ya sabemos cómo se maneja la imagen de Trump”, comentó.

Otros como el alcalde de Monterrey, Adrián de la Garza, quien también era alcalde de esa ciudad en 2017, consideró que ya se tiene experiencia ante deportaciones que podría ser aplicada a partir del 20 de enero.

“Ya hemos tenido esta experiencia con Trump, a mí me tocó gobernar la ciudad de Monterrey cuando Trump era presidente de Estados Unidos, ya más o menos tenemos una experiencia. Vamos a esperar las determinaciones del gobierno federal porque es una problemática de nivel nacional”, destacó el político de extracción priista.

Trump llegará a la Casa Blanca este 20 de enero y, a partir del día uno de su gestión, podrá saberse si el discurso antiinmigrante se concreta en acciones concretas contra los 11 millones de personas que viven y trabajan en ese país de forma irregular.

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