La violencia generada por grupos del crimen organizado en la zona fronteriza y la Sierra Madre de Chiapas continúa provocando estragos en el estado, donde al menos 300,000 estudiantes no pudieron regresar a clases este lunes para iniciar el ciclo escolar 2024-2025.
Ante ese contexto, párrocos y empresarios lanzaron un nuevo llamado para exigir acciones inmediatas a las autoridades para frenar esta situación.
Pese a que la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) informó recientemente que “con el fin de reforzar el actual despliegue operativo que mantiene el personal militar e inhibir las actividades de la delincuencia organizada”, fueron desplegados 100 elementos del Ejército Mexicano en Chiapas, religiosos y empresarios insisten en que la violencia continúa azotando al estado.
La Diócesis De San Cristóbal de Las Casas llamó a las autoridades a dar una solución a la situación delicada que se vive en el estado y en donde la población encuentra dificultades para permanecer en las comunidades de Chicomuselo, Pantelhó y Comalapa.
"Vivimos momentos muy complicados, muy difíciles por la violencia genera por el crimen organizado, les pedimos a las comunidades que se unan, si las comunidades están unidas podrán resistir los embates de esta situación, comunidades divididas, dispersas son víctimas, pero igual a las familias les pedimos que estén atentos a sus jóvenes, pues muchos jóvenes son cooptados por el crimen", dijo el monseñor Luis Manuel López.
En tanto que Aníbal Enrique Núñez, empresario de la asociación Procentro, informó este martes que ante la creciente inseguridad en el estado, las ventas han disminuido hasta un 70% y la contratación de empleados ha bajado más del 50%.
Enrique Núñez apuntó además las nuevas autoridades electas que van a entrar en octubre a hacer su trabajo, "no sean omisas como las que tuvimos en esta pasada administración".
Por ello, pidió "a las autoridades que están y a las que vienen que tomen cartas en el asunto".
Ambos llamados a atender la situación de violencia en Chiapas se suman a otros que se han llevado a cabo desde hace meses atrás.
Apenas este sábado 24 de agosto, la diócesis de San Cristóbal de las Casas pidió al Instituto de Elección y Participación Ciudadana (IEPC) no realizar el proceso de reposición electoral en los municipios de Chicomuselo y Pnatelhó, esto debido a la falta de condiciones al debido proceso y al conflicto de inseguridad que prevalece en ambos municipios.
Si bien el IEPC determinó suspender las elecciones en Pantelhó, el proceso electoral sí se llevó a cabo en Chicomuselo y en el municipio Capitán Luis Ángel Vidal, en donde este domingo 25 de agosto fueron instaladas 33 casillas que para que poco más de 18,000 personas estuvieran en posibilidad de ejercer su derecho al voto, para elegir a integrantes de Ayuntamientos de los municipios.
Durante lo que va de esta semana, la violencia también ha acechado a los estados de Michoacán y Guanajuato.
Este martes, en la zona de Tierra Caliente del estado de Michoacán, se registraron diversos hechos violentos por parte de presuntos integrantes del crimen organizado.
El primer hecho se registró luego de que las instalaciones de la Policía Municipal de Buenavista Tomatlán fueron atacados, con artefactos lanzados a través de drones y, aunque se registraron al menos tres explosiones, no se reportaron víctimas.
Esta acción fue acompañada de balaceras, quemas de vehículos y bloqueos en vialidades de algunos municipios aledaños, sobre todo la carretera Buenavista-Apatzingán, que se prolongaron durante varias horas.
Alrededor de las 14:30 horas, la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) de Michoacán informó, a través de sus redes sociales, que “gracias al esfuerzo conjunto entre la Guardia Civil, Ejército Mexicano, Guardia Nacional y Fiscalía General del Estado de Michoacán, el orden en Tierra Caliente se fortalece. La circulación en la zona de Apatzingán y Buenavista ha sido restablecida y los operativos continúan para garantizar la seguridad”.
En tanto que en Guanajauto, en menos de 24 horas se registraron tres masacres que dejaron un saldo de 12 personas fallecidas.
La tarde del lunes se registraron dos ataques simultáneos a dos joyerías, dejando cuatro personas muertas y al menos cinco lesionadas la tarde en la Zona Centro de Celaya; la balacera generó pánico entre consumidores y empleados del sector.
Alrededor de las 12:30 horas se registraron los ataques a la joyería denominada “Alcántara”, ubicada en la calle Ignacio Allende, frente al Jardín de San Agustín y a media cuadra de la Presidencia Municipal, y en otra, de la misma empresa, localizada en la calle Artemio Venegas.
En los tiroteos presuntamente fallecieron los encargados y propietarios de los dos negocios, así como dos guardias privados. Algunas de las personas lesionadas transitaban por esas vías al momento de las detonaciones.
Horas más tarde, cerca de las 20:30 horas en la colonia San Juan, cerca de la carretera Salvatierra-Celaya, tres hombres y una mujer fueron asesinados por varios hombres armados.
Mientras que en la madrugada de este martes, tres hombres y una mujer fueron ejecutados en una vivienda del Barrio de San Antonio, también en el municipio de Celaya.
