A pesar de ser una comunidad acechada por el crimen, los habitantes de Texcaltitlán no solían presentar denuncias. Entre enero y octubre de 2023, en ese municipio se presentaron solo 14 denuncias por extorsión, de acuerdo con datos recopilados por el Observatorio Nacional Ciudadano (ONC) del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP).
La extorsión es un delito extendido por todo el país, sin embargo, poco denunciado. El director de ONC, Francisco Rivas, ha alertado que este delito llega a tener una cifra negra de hasta 100%.
“La cifra negra es de 100%; hay una impunidad de 100% en este delito”, dijo en diciembre de 2022 al presentar el estudio “La extorsión bajo el caleidoscopio, muchas modalidades y pocas políticas públicas”.
El estudio elaborado por el ONC advierte que la extorsión es un delito complejo, el cual no solo afecta a grandes empresas, también a ciudadanos.
“Se ha vuelto tan complejo y ubicuo que el énfasis que las autoridades ponen en su medio comisivo genera problemas para su eficaz tipificación delictiva y poco contribuye a la formulación e implementación de políticas públicas capaces de frenarlo. La extorsión es mucho más que un delito patrimonial porque aun cuando no se haya consumado lesiona severamente a las víctimas y el daño comunitario es amplio”, advierte el estudio.
De acuerdo con la Encuesta Nacional de Victimización y Percepción sobre Seguridad Publica 2023 , la extorsión fue uno de los delitos más frecuentes en México durante el año anterior, junto con fraude, robo o asalto en calle o transporte público.
En 2022, la pérdida anual de las víctimas de extorsión ascendieron a 3,339 pesos, cifra mayor a la de 2021 cuando se estimó en 2,155.
Esa misma encuesta revela que la extorsión fue el delito con mayor cifra negra: 97.4%.
Entidades como Michoacán, en donde la extorsión suele afectar la producción de limón, a pollerías, tortillerías, tiendas y casi cualquier comercio, acumula 203 denuncias.