Es el Estado de México la primera entidad en extorsiones. Tan solo en 2021, este estado concentró el 36% de los ilícitos, 1 de cada 3. Municipios como Toluca, Ecatepec, Nezahualcóyotl, Naucalpan, Tlalnepantla, Tecámac, Chimalhuacán, Cuautitlán Izcalli y Chalco encabezan la lista de donde más carpetas se han abierto.
“La Familia Michoacana realiza desde hace tiempo una ordeña, un esquema de extorsión y de cobro de piso contra negocios locales”, agrega David Saucedo.
Los comerciantes, empleados y empresas son los sectores más afectados por la extorsión, que en su mayoría es telefónica, presencial o medios digitales.
Además en esa entidad también operan grupos criminales como El Cártel del Golfo, Los Beltrán Leyva, Los Rojos, la Unión Tepito, la Fuerza Anti Unión, Los Rojos, el Cártel de Tláhuac, el Cártel del Centro, el Cártel del Sur, La Nueva Empresa, el Grupo del Comandante R10, entre otros.
Además de la extorsión y narcomenudeo, en esa zona del país también el crimen organizado se dedica al robo de hidrocarburos, venta de armas, secuestro, trata de personas, y secuestro.
Para enfrentar al crimen organizado, el Estado de México cuenta con un estado de fuerza de más de 52,000 elementos: 18,000 de la policía estatal, 8,912 de la Guardia Nacional, 23,140 municipales y 2,460 policías de investigación.
El Estado de México es una de las entidades en las que el gobierno federal ha implementado acciones para la pacificación, entre ellas el envío de fuerzas armadas, sin embargo no ha funcionado.
Salvador Maldonado, especialista en seguridad de El Colegio de Michoacán, explica que la militarización de una entidad por sí misma no es una estrategia que de resultados.
“La violencia no se va a combatir con más militarización. Es importante en algunos espacios, pero el problema es que la militarización no viene acompañada de un plan que realmente tenga la intención de desarticular las estructuras delictivas que se generan desde abajo hacia arriba o desde arriba hacia abajo. Mientras no haya esa voluntad va a ser casi imposible que bajen esos ciclos de violencia”, sostiene.