Las hermanas aprovecharon los recorridos de seguridad del Ejército, la Guardia Nacional, y la Policía Estatal, para ir por algunas de sus pertenecías. Se fueron de ahí hace un año después de que se registrara una serie de homicidios y por amenazas de grupos de la delincuencia en la región.
Juanita, de 42 años, halló su hogar saqueado. Lo mismo vio en los hogares de sus vecinos.


“Vinieron de otros lugares, con otro acento, a veces cuando llegaba uno a las tienditas, que parrandeaba uno ahí, llegaban ellos muy armados y muy todo, agarraban un refresco y hasta eso lo pagaban, pero, pues uno no pensó que fueran a ser ofensivos”, relató un poblador a Pedro Anza sobre la llegada de los grupos de la delincuencia a la región.
“Aquí yo los empecé a ver en julio del 2020, todo lo que fueron esos seis meses si había balaceras, había enfrentamientos entre ellos, nomas ahí, uno no pensó que se fueran a meter con uno, ya el cuatro de marzo fue cuando mataron aquí a un señor y a otro se lo llevaron de aquí del ranchito”, le relató otro.