En una nueva oleada de violencia en Michoacán, nueve personas fueron asesinadas en hechos distintos durante esta semana, que inició con el homicidio del periodista Roberto Toledo.
Desde hace un par de años, Michoacán está bajo fuego por la disputa entre el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), La Nueva Familia Michoacana y Los Caballeros Templarios, que se enfrentan por el control de actividades ilícitas en la región.
El pasado 1 de febrero, la Fiscalía General de Justicia del Estado de Michoacán (FGEM) informó sobre el hallazgo de cuatro cadáveres en el municipio indígena de Tingüindín.
La fiscalía indicó que las víctimas eran cuatro hombres —hasta el momento sin identificar— y presentaban heridas producidas por proyectil de arma de fuego.
Al día siguiente, el 2 de febrero, las autoridades encontraron en el mismo punto otros cuatro cadáveres, uno de ellos portaba vestimenta táctica.
Las víctimas, que presentaban signos de tortura e impactos de arma de fuego, fueron localizadas a la orilla de un camino de terracería que une los poblados de La Yácata y Tacátzcuaro.
La fiscalía estatal indicó que se investiga la posibilidad de que ambos hechos estén relacionados entre sí, pues existen indicios que apuntan a ello.
En la región de Tingüindín operan diversos cárteles de droga que se disputan el control de la producción de la droga sintética conocida como "cristal".
El pasado 31 de enero, el periodista Roberto Toledo fue asesinado afuera de las oficinas del medio Monitor Michoacán, en el municipio de Zitácuaro.
Toledo recibió varios impactos de arma de fuego y murió cuando era trasladado a un hospital. El crimen fue perpetrado por al menos tres sujetos, quienes lograron escapar del lugar.
Aunque hay registros de la labor periodística de Toledo, el vocero de la Presidencia de la República, Jesús Ramírez Cuevas, afirmó que se desempeñaba como "auxiliar de un despacho de abogados, no como periodista".
Organizaciones dedicadas a la defensa y protección de los periodistas exigieron a las autoridades agotar todas las líneas de investigación en este crimen, pues recordaron que por la precariedad de la labor algunos comunicadores desempeñan otros oficios.
La fiscalía de Michoacán informó el 2 de febrero que logró la detención de cuatro personas y aseguró tres vehículos y ocho armas de fuego, tras un enfrentamiento registrado en el municipio de Quiroga.
En estos hechos, de acuerdo con el reporte oficial, resultaron heridos dos agentes investigadores que se dirigieron al lugar para cumplimentar una orden de aprehensión.
Sin embargo, al transitar por la calle Pino Suárez, de Quiroga, se encontraron con unos vehículos, cuyos ocupantes al ver las unidades oficiales accionaron armas de fuego en su contra.
Tras el ataque, los agresores descendieron de las unidades y se dieron a la fuga corriendo; en el lugar se localizaron tres vehículos, dos de ellos, con reporte de robo, así como cuatro armas de fuego.
Minutos después, personal de la fiscalía fue alertado sobre un grupo de personas armadas que ingresó a un domicilio, donde lograron la detención de cuatro personas.
