Siendo el primer estado en pasar a verde en el semáforo epidemiológico, Campeche se convirtió en el laboratorio de retorno a las aulas, tras un año del aprendizaje en casa a raíz de la pandemia.
En la primera fase, se determinó la apertura de 137 primarias multigrado de comunidades rurales (de menos de 1,000 habitantes), que abarcó 5,000 estudiantes y 200 docentes; en la segunda fase se prevé la reapertura de 293 planteles y en la tercera el resto.
Para el regreso, se establecieron algunas medidas para garantizar el bienestar en las aulas como es el personal vacunado, clases con no más de 12 alumnos, además se realizan tres filtros: el primero, desde casa, donde los familiares deberán asegurarse que el menor se encuentre sano y sin algún tipo de síntoma; el segundo, al llegar a la escuela (toma de temperatura y aplicación de gel antibacterial) y el tercero, en las aulas, donde se procurar la sana distancia y el lavado de manos o, en su defecto, el uso de gel con alcohol.
Actualmente, el gobierno federal lleva a cabo el plan de vacunación en personal educativo para poder regresar a las aulas en todo el país, lo antes posible, como lo ha pedido el presidente Andrés Manuel López Obrador en diversas ocasiones, aunque insiste en que es “voluntario”.
Hasta el momento 916,135 personas que trabajan en el sector educativo han sido vacunados, la mayoría con el fármaco de CanSino –que es de una dosis– aunque aún hay 977 docentes de Campeche, que fueron inmunizados con Pfizer que es de dos inyecciones, a quienes les falta un refuerzo.