Hace dos meses, Bonilla anunció que su gobierno tenía la intención de expropiar este club privado para ponerlo al servicio de la comunidad.
El gobernador acusó que los propietarios habían incumplido con sus obligaciones fiscales, como el pago de impuesto predial y de agua, y señaló al alcalde de Tijuana, Arturo González Cruz, de "encubrir" y "beneficiarse" con esta situación.
Este martes, el mandatario estatal formalizó sus intenciones de expropiar el club. Argumentó que con esto "todos los tijuanenses" tendrán acceso a un espacio recreativo.
La publicación señala que la intención de expropiar esta propiedad es habilitar un parque urbano para la interacción social, en razón de la necesidad de áreas verdes para el esparcimiento.
"Los terrenos del Club Campestre de Tijuana son los más apropiados, idóneos e insustituibles para llevar a cabo la construcción y habilitación del proyecto denominado Complejo Interactivo Campestre, en virtud de que no se cuenta en la ciudad con ningún otro predio que cumpla con las características", se lee en el decreto.
El titular de la Secretaría de Gobierno, Amador Rodríguez Lozano, será el encargado de coordinar y designar a las personas que notificarán a los socios, a quienes se otorgará garantía de audiencia.
La declaratoria de utilidad pública, firmada por Bonilla y su secretario de Gobierno, surte efectos a partir de su publicación.