Las familiares de José Antonio Yépez 'el Marro', detenidos el fin de semana pasado tras un operativo en San Isidro Helguera, municipio de Celaya, Guanajuato seguirán en prisión preventiva.
Así lo decidió la jueza de control que celebró la audiencia que duró varias horas y donde la madre, la hermana y la prima del líder del Cártel de Santa Rosa de Lima, fueron acusadas por delitos contra la salud en su modalidad de posesión con fines de venta.
De acuerdo con el diario El Universal, la jueza declaró este miércoles la legal detención de Eva María, Juana Erika y Rosalba, madre, hermana y prima del líder, respectivamente, y dos personas más identificadas como Marlene y Jesús Emmanuel, presuntos integrantes de la organización delictiva.
En la audiencia que comenzó la tarde de este martes en la oficinas del Poder Judicial en Puentecillas, Guanajuato, la jueza también dictó que ésta se aplazara a fin de que la defensa cuente con tiempo para recaudar pruebas que permitan demostrar la inocencia de sus representados.
Las autoridades identifican a las mujeres como operadoras financieras del cártel dedicado al robo de combustible y venta de drogas.
Por su parte, la Fiscalía General del Estado (FGE) detalló que los siete menores detenidos el fin de semana en el operativo que la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), la Guardia Nacional y autoridades de Guanajuato, llevar´án su proceso en libertad.
7 de las personas detenidas y puestas a disposición son menores de edad, por ello la agencia del Ministerio Público Especializado se encargó de su proceso legal 3/5
— Fiscalía General del Estado de Guanajuato (@FGEGUANAJUATO) June 23, 2020
En tanto, se informó que para el resto de las personas aprehendidas se abrió una investigación por bloquear una vía de acceso, daños y otros por entorpecer labores de la autoridad.
En tanto la audiencia se llevaba a cabo, el Ejército y fuerzas estatales desplegaron un operativo en la refinería de Pemex ubicada en la ciudad de Salamanca, ante posibles acciones del Cártel de Santa Rosa de Lima.
Desde el lunes por la noche, el Ejército, la Guardia Nacional y las Fuerzas de Seguridad Pública del Estado colocaron vallas en las calles cercanas a la refinería para limitar el acceso a la instalación.
De acuerdo con fuentes del gobierno del estado, este despliegue obedeció a la llamada de un supuesto integrante del cártel, que amenazó con llevar a cabo daños a la infraestructura de Pemex.
Voceros de la empresa estatal aseguraron que la operatividad de la planta se mantiene de "manera normal", al igual que el acceso de sus trabajadores.
Con información de EFE.
