Siete semanas después de que el COVID-19 llegó a México, la fase 3 está cada vez más cerca, pese a que el avance ha sido –como en otros países– disparejo y se concentra en ciertas ciudades. Por ejemplo, cuando en la capital los nuevos casos positivos aumentan de 200 o más por día, en estados como Colima, apenas se registran 11 personas contagiadas en lo que lleva la epidemia.
La autoridades de Salud advirtieron la semana pasada que el regreso a las actividades cotidianas será escalonado y que los municipios en los que se hayan controlado los contagios podrán retornar el 17 de mayo, mientras que en donde existe una mayor dispersión, si se siguen las medidas, será el 30 de mayo. En este último grupo, está la Ciudad de México, donde los hospitales ya están casi en su máxima capacidad y aún no se llega al pico más alto de la curva.