Tal y como establece el Código Penal y La Ley de Salud de Yucatán, las personas que hayan sido diagnosticadas con coronavirus COVID-19 y no acaten el aislamiento en casa para evitar el contagio podrían recibir un "castigo" de hasta 3 años de cárcel y además podrán ser acreedores a una multa de hasta 86,800 pesos.
El gobernador de Yucatán, Mauricio Vila, precisó este lunes que esta medida no aplicará para toda la población sino únicamente a las personas que hayan recibido un resultado positivo de la prueba confirmatoria de este virus, que hasta la noche del lunes ha causado 20 decesos y 993 contagios en todo el país.