En el caso del corazón de Nuevo León, para intentar prevenir los contagios no solamente se han puesto en marcha medidas ordenadas por el gobierno estatal —como el cierre temporal de cines, bares, casinos y antros—, sino que el municipio de Monterrey también realiza operativos para vigilar que no se lleven a cabo aglomeraciones de personas.
Así, policías patrullan en los alrededores de parques públicos y funcionarios municipales revisan que los establecimientos se mantengan cerrados. Estos últimos incluso tienen la facultad de imponer multas y hasta de cancelar permisos a los locales que desacaten las disposiciones de la Secretaría de Salud estatal.
El 11 de marzo, la dependencia confirmó el primer caso de coronavirus en Nuevo León.
Para el martes pasado, su titular, Manuel de la O Cavazos, informó que en tan solo ocho días el número de casos detectados en la entidad ascendió a 14, todos ellos concentrados en San Pedro Garza García, un municipio que colinda con Monterrey y que forma parte de su zona metropolitana.
Verdades y mentiras sobre el coronavirus