“Tuvimos alto índice de chicos positivos, estamos hablando de que nos ingresan 400 alumnos, tuvimos entre un 18 y 20% de casos positivos”, dijo la subdirectora.
El consumo de drogas no es motivo de expulsión de los estudiantes, pero son canalizados, junto con sus padres, con personal de la Secretaría de Salud del Gobierno del estado para que sean atendidos.
“No es una prueba para que expulsemos estudiantes, para que rechacemos estudiantes, al contrario, lo que nosotros queremos hacer, un alto porcentaje de estos chicos que tienen consumo de alguna sustancia, los papás lo desconocen, entonces lo que nosotros hacemos de primera instancia al ser positiva su prueba, hacemos obligatoria la presencia del papá para darle el resultado y por lo tanto pedimos apoyo a la Secretaría de Salud, a Salud del Adolescente, para que nos puedan ayudar a brindarles asesoría de acuerdo a la situación de que se trate”, explicó Patricia Manjarrez.