La propuesta de MC contempla la prohibición a la difusión de propaganda gubernamental durante el proceso de revocación, con lo cual el presidente Andrés Manuel López Obrador no podría promover este ejercicio en sus conferencias mañaneras.
En cambio, se establece que los ciudadanos sí podrían llevar a cabo campañas de difusión para obtener el número de firmas necesarias para solicitar la revocación.
La pregunta que plantea MC establece: "¿Está usted de acuerdo con revocar el mandato al presidente de la República para que sea destituido del cargo?". También propone que la Cámara de Diputados esté obligada a dotar al Instituto Nacional Electoral (INE) del presupuesto necesario para este ejercicio.
En rueda de prensa en el Senado, sin embargo, Delgado consideró innecesario tanto un periodo extraordinario como hacer la consulta sobre revocación en 2022.
"No aprobaremos ningún periodo extraordinario en las dos semanas que restan al receso", advirtió. "Para un gobierno que ha tomado como bandera la austeridad, realizar un ejercicio de esta naturaleza es costoso y, más allá de eso, en Movimiento Ciudadano consideramos que no es necesario en medio de una crisis tan fuerte como la que tenemos".
"No hay prisa", dice el PRI
Por su lado, la legisladora priista Dulce María Sauri, presidenta de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, coincidió en que no hay razón urgente para que haya sesiones extraordinarias.
"Cuando inicia la próxima Legislatura, en el transcurso de septiembre, podrá ser aprobada la nueva ley (que regule la revocación). Desde mi perspectiva, no hay prisa, porque los plazos están abiertos, el proceso inicia el 1 de noviembre", dijo.
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