Toledo es candidato a reelegirse como diputado federal por las siglas del PT y por el Distrito 5 de Puebla.
En 2018 llegó a San Lázaro por el PRD y por el Distrito 23 de la Ciudad de México, en Coyoacán, alcaldía que gobernó siendo perredista.
En la 64 Legislatura se sumó a las posturas de Morena, pero legisladores de ese partido no quisieron que se integrara formalmente a la bancada. Sin embargo, el acuerdo político con él, para tener su voto, sí existía.
Según la Fiscalía General de la Ciudad de México, Toledo tenía "un esquema de ingresos" que le permitió un incremento sustancial de su patrimonio de forma "cuestionable", pues supuestas empresas privadas le pagaron mensualmente pero estas no reportan ingresos suficientes para esos pagos.
La Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) de la Secretaría de Hacienda (SHCP) informó que una de las empresas, constituida en 2016, "manifestó en su declaración fiscal de ese año no haber percibido ingresos", y en 2017 "consignó un ingreso muy menor", insuficiente para haber pagado al diputado los 3.4 millones de pesos que este aseguró haber percibido.