Las llamas y la densa columna de humo negro fueron visibles a varios kilómetros de distancia, lo que provocó la alarma entre vecinos de la zona. De manera preventiva, las autoridades evacuaron a cerca de 500 personas.
De acuerdo con los Bomberos de la Ciudad de México, el incendio fue extinto y se realizaron labores de remoción sin que hubiera personas lesionadas ni víctimas mortales, aunque se reportan daños estructurales en la nave industrial. El área total afectada fue de 1,000 metros cuadrados.
Se mantiene un perímetro de seguridad ante el riesgo de derrumbe y por la toxicidad del humo generado por la combustión del poliuretano, que al arder puede liberar compuestos peligrosos como cianuro de hidrógeno y monóxido de carbono.
Peritos de la fiscalía y del cuerpo de bomberos ya trabajan en el sitio para determinar el origen del fuego, que pudo haberse iniciado por un cortocircuito, una chispa en una zona de almacenamiento o incluso negligencia en procesos químicos, aunque ninguna hipótesis ha sido confirmada oficialmente.