El origen del conflicto
Todo inició en la sesión de conferencia -que es un órgano colegiado que aprueba el orden del día de las sesiones- celebrada este mismo miércoles por la tarde, cuando el diputado del PVEM pidió que se incluyera el dictamen de la Ley de Bienestar Animal, el cual también se refiere a las corridas de toros.
Sin embargo, a la hora de la votación, solo Morena y PT acompañaron el dictamen de Jesús Sesma, mientras que PRD, PAN y PRI votaron en abstención, y hubo dos votos en contra por parte de Movimiento Ciudadano y una diputada del PAN, por lo que se desechó la propuesta.
“Tengo que decirle mucho pesar y a título personal al diputado Gaviño que fue una persona que me prometió su compromiso a incorporar este dictamen, lamento mucho su falta de honor, de palabra, pero así es esto, seguiremos adelante”, recriminó el legislador.
En respuesta, Jorge Gaviño negó que se haya comprometido a votar una ley que -a su consideración- va en contra del bienestar de los animales.
“Al revisar el dictamen, me encuentro con violaciones graves al derecho de los animales que yo no podría sostener que se pudiese aprobar una ley así, es un dictamen regresivo, se está considerando la posibilidad de que se asesinen a los animales que no tengan dueño”, explicó.
Gaviño agregó que dicho dictamen no prohíbe las corridas de toros como originalmente se tenía contemplado y da facultades a las alcaldías para otorgar permisos para la celebración de espectáculos con animales, entre otros temas.
Por lo anterior, el diputado Jesús Sesma abordó a Jorge Gaviño al exterior de su oficina para reprocharle el no haber recibido su apoyo y se hicieron de palabras, varias de ellas altisonantes y posteriormente pasaron a los golpes.