El gobierno de la Ciudad de México oficializó este miércoles, a través de un aviso publicado en la Gaceta Oficial, el cambio de nombre de la calle General Gabriel Hernández, en la colonia Doctores de la alcaldía Cuauhtémoc: ahora se llamará “Digna Ochoa y Plácido”,
El cambio se da este 19 de octubre, día en que se cumplen 21 años de que la defensora y abogada Digna Ochoa y Plaćido fue encontrada sin vida en su despacho ubicado en la calle Zacatecas 31, en la colonia Roma.
Además, el cambio de nombre forma parte de lo que la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) ordenó en 2021 como parte de las medidas de reparación del daño cometido en contra de Digna Ochoa y su familia: se estableció que se debía otorgar el nombre de la defensora a una calle en la ciudad de Misantla, Veracruz, así como en la Ciudad de México.
Durante el acto de disculpa pública por parte del Estado mexicano por este caso, el subsecretario de gobernación de la Ciudad de México, Martí Batres, destacó la publicación de este acuerdo y detalló que la calle se ubica a un costado de las instalaciones de la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México.
A nombre de la J de G @Claudiashein en el Acto de Reconocimiento de Responsabilidad del Estado Mexicano y Disculpa Pública a la Defensora de Derechos Humanos Digna Ochoa y Plácido y familia informé que desde hoy la calle donde está la @FiscaliaCDMX se llama Digna Ochoa y Plácido. pic.twitter.com/s3tCXHbNhr
— Martí Batres (@martibatres) October 19, 2022
El 5 de septiembre pasado, el cabildo de Misantla también aprobó cambiar el nombre de una calle, de “Carlos Salinas de Gortari” a "Digna Ochoa y Plácido".
Digna Ochoa y Plácido nació en 1964 en Veracruz y fue una conocida defensora de los derechos humanos involucrada en la promoción de la justicia. Además, participó en diversos casos ante el Sistema Interamericano como integrante del Centro ProDH.
En octubre de 2001, el cuerpo de Digna Ochoa fue hallado sin vida en su despacho de la Ciudad de México. Su compañero Gerardo González Pedraza informó a las autoridades y luego acudió a la Fiscalía a presentar una denuncia por el delito de homicidio.
Ese mismo día se inició una averiguación previa y unos días después fue ampliada la denuncia para incorporar el hallazgo de un mensaje con una amenaza en el inmueble donde ocurrieron los hechos.
A pesar de los indicios, la investigación judicial en México determinó que la muerte de Digna Ochoa se trató de un suicidio.
En 2021, la CIDH resolvió que en la investigación del caso hubo irregularidades en el proceso y que en realidad los hechos correspondían a un homicidio en un contexto de agresiones, amenazas y violaciones a los derechos de los defensores en México.
