"El riesgo es muy alto. Contrasta ver que en otros lugares, como es el Reino Unido, aparezca el primer ministro (Boris Johnson) diciendo que deben tener muchas precauciones, limitar la actividad social, y aquí se festeja en el sentido contrario", dice en entrevista.
"Se apuesta a que los casos de la enfermedad van a ser muy leves, a que no pasa nada. Creo que es un error", expone.
Rafael Bojalil Parra, investigador del Departamento de Atención a la Salud de la UAM Xochimilco, considera que hasta el momento existe poca información, en especial debido a la disminución de pruebas de COVID-19 en la ciudad.
En enero se llegaron a aplicar hasta 27,164 pruebas en un día, de acuerdo con el portal Our World in Data, mientras este 19 de diciembre se aplicaron apenas 642, según el reporte diario del gobierno capitalino.
"Eso no quiere decir que sean la totalidad de los casos, son los detectados, y estamos haciendo muy pocas pruebas. Estamos haciendo pruebas más o menos al nivel de los primeros meses de la pandemia en 2020", indica el académico de la UAM.
Otro factor en juego es el incremento de casos de esta variante en Estados Unidos.
"El virus no requiere pasaporte. Si en Estados Unidos el 73% de sus casos son Ómicron, lo lógico es que muy pronto tengamos aquí la gran mayoría de nuestros casos por esta variante. Esto se debe a que es mucho más contagiosa que Delta, que hasta el momento era la más contagiosa", señala Bojalil.