“Ya es muy grave y complicada la situación, hay sectores muy afectados, entre ellos el turismo que daba empleo a más de 3 millones de personas, los servicios, las escuelas particulares”, agregó Zúñiga.
La asociación de empresarios se pronunció a favor de la determinación de la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, para mantener abiertos los negocios y actividades al considerar a la ciudad en semáforo naranja, luego de que la Secretaría de Salud federal la clasificara en rojo.
“Nosotros hemos respaldado la decisión de la jefa de Gobierno de no ir a semáforo rojo y mantenernos en semáforo naranja. Si vamos a rojo sería trágico para la recuperación de los empleos, se perderían miles de empresas más y se pondrían en riesgo de un cierre definitivo”, sostiene Zúñiga.
El presidente de Coparmex reconoce que la contradicción entre el Gobierno federal y el capitalino crea incertidumbre para los empresarios mientras la ciudad atraviesa por la tercera ola de contagios de COVID-19.
Sí causa incertidumbre. Nosotros hemos estado señalando que los semáforos epidemiológicos ya dejaron de ser una estrategia, tenemos que cambiar. Ya mencionamos la vacunación y los protocolos, pero la verdad es que debemos aprender a vivir con el virus".
“Debemos aprender cómo vivir y eso lo tenemos que hacer con concientización, buscando nuevos protocolos pero no creemos que el semáforo rojo sea una opción después de casi dos años”, considera Zúñiga Salinas.