Uno de los propósitos del Gobierno de la Ciudad de México para 2020 es decir adiós a los plásticos de un solo uso, por lo que desde este 1 de enero está prohibido —sí: prohibido— que los establecimientos comerciales entreguen a los consumidores bolsas de plástico desechables.
En la capital del país, no se podrá vender, distribuir o entregar bolsas de plástico a los ciudadanos, con excepción de aquellas que sean compostables, sean necesarias por cuestiones de higiene o se utilicen para evitar el desperdicio de alimentos.
Todo lo anterior está incluido en la reforma a la Ley de Residuos Sólidos local publicada el 25 de junio en la Gaceta Oficial.