¿Like a la Reforma Judicial? Actores y audiencias en la arena digital

Una buena parte de lo que se lanza en los medios de comunicación, se moldea y aterriza en lo digital, pues según el Digital News Report 2024, el 64% de la población se informa a través de las redes sociodigitales. De ahí que diferentes actores políticos y sociales han desplegado diferentes estrategias para incidir en la esfera digital, desde renovando el perfil de los spin doctors hasta construir una red de actores que actualicen la teoría de Lazarsfeld y Katz.

Por lo anterior, diferentes actores activaron distintas estrategias para desdoblar y reforzar el mensaje sobre la reforma judicial tal y como se observa en las gráficas. Si bien, los medios tradicionales son los que le dieron seguimiento al tema, no son los que más interacciones generan. Es decir, hay actores digitales que con menos publicaciones, logran un mayor nivel de participación entre usuarios.

Al considerar el periodo del 26 mayo al 26 de junio para analizar el término “reforma judicial”, en las plataformas bajo análisis encontramos lo siguiente:

En Facebook, medios como El Universal Online, Latinus y Radio Fórmula que realizaron alrededor de 30 publicaciones en el periodo señalado, logran un promedio de interacciones (reacciones + comentarios + compartir) de 66,000, mientras que usuarios como El gato político alcanzan las 68,182 interacciones con 17 publicaciones; Lilia Aguilar logra 51,900 con una sola publicación, o Campechaneando Youtube, que al postear el mismo video en ambas plataformas logra 50 mil interacciones.

En Instagram existen otros fenómenos a destacar respecto a las interacciones (me gusta + comentarios). Aunque los medios que migraron al campo de lo digital como Radio Fórmula, El Universal o Grupo Reforma hacen entre 20 y 25 publicaciones en un seguimiento informativo alcanzando un total de 30,000 interacciones en promedio, Xochitl Gálvez con una sola publicación sobre el tema, logra 25,687 interacciones.

Twitter sigue una lógica muy distinta, pues aunque solo el 14% de la población mexicana la usa con fines informativos, su capacidad de reacción y diálogo la vuelve atractiva para ciertos actores digitales que la usan como un altavoz de bolsillo para diferentes circunstancias. Por ejemplo, usuarios como catrina_nortena, elgatopolitico_, guruchuirer, Melissa_Bely, Juan_OrtizMX, JJDiazMachuca, arturoangel20, están muy por encima de las casas informativas en cuanto al nivel de interacción (me gusta + reposteos) que generan, pues además intercambian mensajes con otros usuarios, situación que los medios tradicionales no realizan.

Youtube es un fenómeno respecto a la cantidad de interacciones (me gusta + comentarios) que genera pues hay videos que logran entre uno y dos millones de participaciones entre los usuarios. Canales como Campechaneando y Campechaneando Noticias, alcanzan 2 millones de interacciones con 4 videos. O usuarios como El Charro Político, Crítica Dura MX o El Chapucero Today alcanzan un promedio de 300,000 interacciones en un video.

Muchos medios y periodistas podrían descalificar por diferentes motivos el trabajo que realizan dichos canales, sin embargo los ojos de las personas están detrás de esos contenidos.

También hay quien habla de los sesgos de confirmación para explicar dichos fenómenos. Lo relevante es el cocktail que se genera, pues por un lado el consumo de dichos contenidos crece y, por otro lado, la confianza en las noticias cae. Pues, en términos generales, los jóvenes, la gente de bajos ingresos y aquellos con niveles más bajos de educación formal tienden a confiar menos en las noticias pues de manera recurrente, dichos grupos reciben poca atención en los medios y piensan que la cobertura sobre ellos no es justa.

Los foros sobre la Reforma Judicial ya comenzaron y la cobertura en diferentes espacios tradicionales y digitales será exhaustiva, ahora nuestra labor es procurarnos un menú que nos permita una dieta informativa balanceada y contrastada.

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Nota del editor: Alejandro Martín del Campo H. es investigador del Observatorio de Medios Digitales del Tecnológico de Monterrey. Las opiniones publicadas en esta columna corresponden exclusivamente al autor.