A nivel regional, América del Norte produce 17% de los vehículos en el mundo. México es el primer proveedor de autopartes a Estados Unidos, y representa el 31% de sus importaciones de vehículos. Casi el 50% de importaciones y exportaciones de vehículos en Estados Unidos tiene origen y destino en México y Canadá.
En México, la industria automotriz es el principal motor exportador. Genera el 18% del PIB manufacturero, el principal ingreso de divisas por encima de remesas y turismo, el 20% de la inversión extranjera directa y casi 30 millones de empleos, entre directos e indirectos, al demandar insumos de más del 80% de las ramas económicas del país.
Al mismo tiempo, hay retos importantes que representan grandes oportunidades. Aproximadamente el 65% de los vehículos que circula en México son importados. Y el 76% de la demanda total en los procesos de producción viene del exterior.
Pero más importantes aún son las oportunidades que México tiene en el corto plazo por la coyuntura internacional actual a partir de la pandemia, las tensiones con China y la guerra en Ucrania. Y en el mediano plazo por la reconversión histórica de la industria a la electromovilidad.
Mucho se ha hablado en los últimos dos años, y particularmente en la reciente Cumbre de Líderes de América del Norte, sobre la importancia de la relocalización de cadenas globales de valor, o el famoso nearshoring.
Las disrupciones globales de cadenas de suministro por los problemas internacionales posicionan a Norteamérica como la región con mayores oportunidades para atraer inversiones históricas en cadenas de suministro. Y México es el país con mayor potencial dentro de la región.
Siendo la industria automotriz el principal motor exportador, y el mejor ejemplo internacional de integración regional de cadenas entre los tres países de Norteamérica, es también la plataforma más importante para captar las inversiones mundiales para la relocalización de cadenas.
Por eso, para México es fundamental y urgente establecer una ruta estratégica y tomar las medidas adecuadas para actuar a tiempo. Nuestro futuro económico y nuestra consolidación como plataforma exportadora mundial dependen de ello.