La política, y en especial las campañas, necesitan de disciplina, entrega, alegría, corazón, empatía, y entendimiento. Las campañas son el mejor tiempo para conocer e interactuar con quienes queremos que confíen en nosotras.
La política necesita que aprendamos a hacer equipo y que las mujeres apoyemos a más mujeres.
La política necesita conocimientos, ciencia, y preparación. Gobernar no es cosa menor. Hay que escuchar, analizar los temas, revisar las consecuencias de nuestras decisiones y cómo cada acción repercutirá en nuestra comunidad.
La pandemia nos ha enseñado el enorme éxito de mujeres jefas de Estado y jefas de Gobierno en Alemania, Nueva Zelandia, Noruega, o Dinamarca, porque esos países creyeron en sus aptitudes, conocimientos, empatía, y comunicación. Pero también nos enseña que las graves crisis se ensañan más con las mujeres que hoy son más pobres, más marginadas, y más olvidadas. Es momento de que las mujeres entendamos que juntas sí podemos cambiar al mundo y que es urgente que empecemos por nuestra comunidad. Es momento de que apoyemos a las mujeres que se animen a cambiar a México.
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Nota del editor: La autora es diputada federal, fue presidenta de la Unión Interparlamentaria.
Las opiniones de este artículo son responsabilidad única de la autora.
