#ColumnaInvitada | ¿Revolución o golpe?

Preguntas del presidente como: ¿qué es lo que vamos a hacer con los ricos? o ¿para qué necesitamos más de un par de zapatos?; junto con propuestas legislativas para modificar el régimen de las Afores, han generado preocupaciones. Aunque el pensamiento político del Presidente es más apegado al nacionalismo revolucionario y presidencialista del priísmo setentero, hay un grupo cercano del presidente que sí tiene una marcada orientación ideológica de izquierda que podría aprovecharse de la necesidad de un “nuevo guión” para intentar impulsar su agenda.

De esto es especialmente relevante la entrevista recientemente realizada por parte del productor Epigmenio Ibarra al presidente López Obrador. En ella existen dos elementos que en otros episodios donde ha gobernado la izquierda han estado presentes: revolución y golpe.

Se sabe que el productor es el encargado de elaborar la “narrativa” gubernamental y de conducir al ejército de redes digitales morenistas. Por eso llama la atención que en la citada entrevista sea él mismo quien use el término “revolución” por encima del de “transformación pacífica” de AMLO y que sea él también quien insista en que los “conservadores” son los que “pasan del enojo a la conspiración y a la incitación al golpe”.

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Hay que tener esto presente pues en Veracruz el mandatario sentenció: “o se está por la transformación o se está en contra de la transformación”. Es decir, o están conmigo o están contra mí. ¿Será que el gobierno apalancará su nueva narrativa entre quienes estén por la revolución y quienes estén por el golpe de Estado? ¿Es por eso que salió con la pifia del Bloque Opositor Amplio (BOA) contra AMLO?

A un año de la elección intermedia del 2021, apostar por esa ruta puede ser suicida para el gobierno, no solo por la polarización implícita que conlleva para el país, sino porque claramente es una visión no incluyente. La gente hoy exige respuestas frente a los estragos de la pandemia, no se vale un nuevo distractor de lucha de clases.

AMLO llegó al poder por una amplia coalición de fuerzas, no todas de segmentos pobres, sino mayoritariamente de clase media. Miles de grupos descentralizados confiaron en que él podría dirigir un cambio que fomentará una mejor convivencia social, no una división que polarizara ideológicamente hacia la izquierda.

Es momento de que el Presidente convoque a un nuevo pacto conciliatorio en lugar de caer en la trampa de una minoría ideologizada, que lo empuje al vacío polarizando entre revoluciones y golpes de Estado. Es ahí donde está la semilla de una #SociedadHorizontal que puede dar frutos mediante el diálogo y la cooperación por el bien de México.

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Nota del editor: El autor es abogado y economista, fue diputado federal, senador de la República y aspirante a una candidatura independiente a la Presidencia.

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