No tiene empacho en decir que su militancia está en el feminismo y sus causas. Por lo que puede señalar incluso a sus propios compañeros de partido cuando advierte contradicciones, por ello se postuló como candidata a la dirigencia nacional de Movimiento Ciudadano, ya que considera que en 20 años esa fuerza política debe abrir esos espacios a mujeres, y que no puede dejar de defender adentro por lo que lucha afuera. Sino me cree, pregúntenle a Dante Delgado, con quien mantiene una relación como de padre e hija, pero siempre encuentra la manera de solucionar diferencias. Y si en casa lo hace, con más razón afuera, con decirles que recientemente le reclamó al dirigente de Acción Nacional, Marko Cortés, su apoyo al paro de mujeres “un día sin nosotras”, pues considera que fue justo en un gobierno panista en el que se inició la violencia criminal, y en lugar de usar una causa como la de la violencia contra las mujeres, el PAN debe exigir acciones a sus gobiernos.
Tampoco le tembló la voz al contestarle a Mario Delgado que “no se trata de definir si está a favor o no de llevar programas sociales a la Constitución. Lo que corresponde al Estado no es ‘apoyar’, debe garantizar pensiones dignas, acceso y permanencia en educación, derechos plenos a personas con discapacidad, y derecho a salud. No es una discusión de conservadores y liberales, sino de discutir si las ‘ayudas’ son garantías suficientes para que personas con mayores desventajas puedan acceder a derechos plenos o son, como lo han sido, programas clientelares para mantenerlos en condición de vulnerabilidad”.
Lee también: Ciudad por ciudad: Las convocatorias para marchar el 8 de marzo
A dónde va...
Actualmente, es diputada federal y para ella es fundamental que exista una oposición sólida, inteligente, responsable, que proponga e impulse reformas en beneficio de la ciudadanía y que se oponga a todo lo que sea contrario a la ciudadanía, y a las instituciones que garanticen derechos.
Desde su curul, ha establecido una agenda concreta que incluye soluciones a los problemas que afectan a la ciudadanía. Ha venido trabajando con organizaciones de la sociedad civil y mantiene su oficina y redes abiertas para recibir a todas las personas que lo necesiten.
Ha fijado posturas concretas en temas como la violencia política en razón de género, los feminicidios, la revocación de mandato, la Guardia Nacional, la reforma constitucional denominada “Paridad en todo”.
Así pues, es una convencida de que ésta, la denominada “Legislatura de la paridad”, es una oportunidad para que todas las diputadas trabajen en el avance por los derechos de las mujeres. Así como de que el movimiento feminista promueve una transformación profunda a nivel mundial y que está poniéndose enfrente para decir “ni un paso atrás; queremos igualdad de condiciones, queremos derechos, queremos vivas y libres a las mujeres”.