La decisión de endurecer algunos delitos e incorporar nuevas sanciones está pensada en atender las preocupaciones de la gente en delitos que afectan la vida diaria de ciudadano en su entorno más cercano, conductas que antes no se registraban como el robo a celular o a bordo de motocicletas, entre otros.
En la lista de reformas, en primer lugar se encuentra el endurecimiento de pena al feminicidio, éste se duplica de 35 a 70 años de prisión para quien lo cometa, de acuerdo con el artículo 148 bis del Código se establece también sanción para quien ejerza violencia sexual, lesiones o mutilaciones previas o posteriores a la muerte, así como actos de necrofilia.
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La jefa de Gobierno tiene un compromiso claro en ese sentido: frenar el feminicidio. Por eso parte de las sanciones que hoy contiene el Código Penal incluyen castigos si existen antecedentes de amenazas, acoso, lesiones o cualquier tipo de violencia a la víctima, así como la existencia de un vínculo sentimental, afectivo, laboral, docente o de confianza.
Otro de los aspectos que incluye la ley es que si el cuerpo es expuesto, depositado o arrojado en algún lugar público, si la víctima estuvo incomunicada antes de su fallecimiento y se encuentra en estado de indefensión también se toma en cuenta para la pena.
