Luego de la pandemia, por fin los cines comienzan a recuperar algo de su ritmo. De acuerdo con el ranking de ‘Las 500 empresas más importantes de México 2022’ de Grupo Expansión, las compañías de cine Cinépolis y Cinemex vieron una variación al alza en sus ventas de 96.7% y 86.4%, respectivamente.
Sin embargo, la pandemia no es el único escenario que ha golpeado a esta industria y con el pasar de los años algunos establecimientos icónicos se vieron obligados a cerrar sus puertas.
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Su presencia en la Ciudad de México ahora es un recuerdo en las mentes de quienes fueran sus visitantes, adornado por los viejos y grandes edificios abandonados que dejaron atrás. Si no te tocó visitarlos, tal vez los hayas visto al pasar frente a ellos. Te compartimos las historias de algunos de estos recintos en la capital del país.
Cinemex CNA
Empezando por el cierre más reciente, este cine era considerado por sus clientes como uno de los más bellos y cómodos de la capital, aspecto que hicieron notar en redes sociales al hablar sobre el repentino aviso de su salida de operaciones.
Este complejo fue fundado en 1995 y su inauguración estuvo en manos de la actriz Salma Hayek y el entonces presidente Ernesto Zedillo Ponce. El proyecto arquitectónico lo realizó el grupo Sordo Madaleno, los mismos tras entro Comercial Santa Fe, Antara Polanco, Plaza Satélite y Plaza Universidad.
Cuando el recinto comenzó operaciones no pertenecía a Cinemex, sino Cinemark, sin embargo, en 2013, la segunda puso a la venta todas sus sucursales, las cuales adquirió la empresa que manejaría este cine hasta 2022.
Cine Ópera
Ubicado en la colonia San Rafael, el Cine Ópera fue inaugurado en marzo de 1949. Actualmente, este edificio abandonado parece atrapado en el tiempo. En su fachada, que aún conserva las marquesinas y el nombre del cine en letras rojas, se levantan dos esculturas de figuras femeninas que representan la comedia y la tragedia, quienes daban la bienvenida a uno de los cines más lujosos de la capital del país.
En este lugar, plagado de mármol, había grandes candiles, butacas de terciopelo y un telón del mismo material que caía de lado a lado en la pantalla en el que se proyectaban las películas.
Fue el sismo de 1985 lo que llevó a este recinto a cerrar sus puertas, pues sufrió grandes daños. Pasaron ocho años para que el lugar reabriera, en 1993, pero ya no como cine, sino como una sala de conciertos.
Pero fue justamente un concierto el que firmaría la carta de sentencia del lugar. En 1998 se presentó la banda Bauhaus. El evento fue altamente cotizado y quienes no alcanzaron a entrar organizaron un ‘portazo’. El lugar se llenó y ante los brincos y entusiasmo de los asistentes, el techo comenzó a caerse a pedazos. Luego de ello, el cine cerró definitivamente y pasó a manos del Instituto Nacional de Bellas Artes.
La Unidad Habitacional Tlatelolco tuvo un esplendor recién se inauguró en 1964, además de viviendas, en el lugar se abrieron espacios comerciales, parques, espacios deportivos, clínicas, escuelas, teatros y más.
Entre las amenidades también había un cine. Éste fue inaugurado en 1967 y no tardó en convertirse en uno de los espacios emblemáticos de Tlatelolco.
Sin embargo, la popularidad del lugar fue poco a poco en declive hasta que en 2001 dejó de proyectar películas. En 2012 se publicó en el Diario Oficial de la Federación su desincorporación del régimen de dominio público y se autorizó su donación a favor del Sistema de Transporte Colectivo Metro, pero la entrega física no se completó.
Cine Cosmos
El Cine Cosmos, pionero de las matinés y las promociones del 3 x 1, fue inaugurado en 1946 en la Calzada México-Tacuba. Dos años después fue restaurado por el arquitecto Carlos Vergara con un estilo Art Déco.
Este inmueble fue utilizado como refugio por estudiantes en 1971 durante el ‘Halconazo’. La luz del cine se apagó a principios de los 90, cuando fue cerrado.
La estructura permaneció abandonada por décadas, hasta que en 2018 se anunció de manera oficial que sería la nueva Fábrica de Artes y Oficios (Faro) de la zona poniente de la CDMX.
El espacio, ya remodelado y como Faro, abrió sus puertas en 2021 y ahora busca promocionar disciplinas artísticas culturales con enfoque comunitario, como circo social, teatro comunitario, danza, artes visuales, arte contemporáneo y clown, entre otras. Cuenta con galerías, caja negra, auditorio, sala de cine, baños, terraza y salones especializados para la formación artística y cultural.
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Cine Variedades
Originalmente llamado Cine Magerit, este espacio dedicado al séptimo arte se ubicaba en la calle Juárez, en el Centro Histórico. Actualmente, sólo sobrevive la facha del edificio, que cubre un lote baldío a sus espaldas.
Palacio chino
Este cine cerró sus puertas en 2017, luego de haber operado por 77 años, los últimos 20 de estos a cargo de Cinemex. El edificio, como su nombre lo indicaba, hacía alusión a la cultura china.
El recinto tenía alfombras rojas y butacas acojinadas en su única sala, con capacidad para 4,000 personas.
Cinemex, anunció el cierre en 2016 y no planteó motivos; sin embargo, en su aviso señalaba que en el futuro daría a conocer la fecha de reapertura, pero hasta la fecha no ha sucedido.