¿Qué es un golpe de calor?
El golpe de calor es el incremento súbito de la temperatura corporal a más de 39 grados, causado por la exposición a extremas temperaturas ambientales.
Suele afectar a individuos que realizan ejercicio físico intenso y a los ancianos o enfermos, siendo así las de mayor riesgo los niños menores de cinco años y adultos mayores de 60 años.
Y es que cabe destacar que el golpe de calor o choque térmico, provoca la elevación de la temperatura corporal que afecta las funciones vitales del organismo, provocando que algunos órganos, como riñones, hígado y cerebro, se pueden ver afectados, lo que puede llevar a insuficiencia renal aguda y hepática hasta el coma y muerte.
Síntomas de un golpe de calor en niños y adultos
En niños
- Temperatura del cuerpo 39°C - 40°C o mayor (medida en la axila).
- Piel roja caliente y seca (se agota la transpiración).
- Respiración y frecuencia cardíaca acelerada.
- Dolor palpitante de cabeza.
- Alteración del estado mental y del comportamiento como: vértigos, mareos desorientación, delirios, confusión o pérdida de conocimiento.
- Convulsiones.
¿Qué niños son más vulnerables?
- Los menores de cinco años y más aún los menores de un año.
- Los niños con enfermedades crónicas que pueden ser: cardíacas, renales, mentales o neurológicas y otras.
- Los niños con fiebre por otra causa o diarrea.
- Los niños que presentan obesidad o desnutrición.
- Los que tienen la piel quemada por el sol.
En adultos
En adultos los síntomas más comunes son:
- Mareo.
- Sudoración (excesiva, al principio; ausente, después).
- Enrojecimiento y sequedad de la piel.
- Fiebre con temperatura desde 39 a 41°C
- Comportamiento inadecuado (como quitarse la ropa sin importar el lugar).
- Aceleración del ritmo cardíaco con latido del corazón débil.
- Dolor de cabeza.
- Ataques con convulsiones.
Cabe resaltar que se debe tener especial cuidado con los bebés, quienes aún no cuentan con madurez de los mecanismos que regulan su temperatura; en los adultos mayores, que por su edad avanzada han perdido esa capacidad de regulación, y los pacientes con alguna enfermedad crónico degenerativa, que por su situación médica se precipitan al golpe de calor.