En un comunicado difundido después, Salazar recordó que en la reciente reunión de presidente Joe Biden y Andrés Manuel López Obrador en México, así como en la Cumbre de Líderes de América del Norte, “nuestros gobiernos reafirmaron su compromiso para trabajar juntos en nuestra seguridad compartida, particularmente para unir esfuerzos contra el tráfico ilegal de fentanilo y armas por el daño que representan para el bienestar de nuestras naciones”.
“El combate contra el fentanilo es una prioridad para el presidente Biden, en la cual México es un socio crucial”, explicó el funcionario estadounidense.
Salazar destacó entre los esfuerzos que “inician en casa” que en Estados Unidos “la propuesta presupuestal para el año fiscal 2023 incluye 42 mil millones de dólares para esfuerzos de política de drogas para vencer la epidemia de sobredosis”.
“A través del Plan de Rescate Estadounidense del presidente Biden invertimos cinco mil millones de dólares en servicios de adicción y salud mental, incluida una inversión histórica de 30 millones de dólares en reducción de daños”, explicó.
Entre los esfuerzos para combatir el tráfico de armas, Salazar apuntó que la administración de Biden impulsó la Ley Bipartidista de Comunidades Más Seguras. “Por primera vez, se le tipifica como un delito con sanciones que pueden llegar hasta los 25 años de cárcel”, detalló.
“Las autoridades estadounidenses han incrementado en 300% el decomiso de armas de fuego que, sin estos esfuerzos, habrían llegado a México. Año con año se decomisan en Estados Unidos más de 600 mil armas”, explicó.