El presidente Andrés Manuel López Obrador reprobó el homicidio de dos trabajadores de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) en Sonora, quienes –dijo– pudieron ser asesinados por “confusión” o por haber restablecido el servicio de luz en una comunidad amenazada por el crimen organizado.
“Tener más precisión sobre la hora (del ataque a los trabajadores), lleva a pensar que pudo haber sido una confusión. Hay otra hipótesis, es que en cumplimento de su deber fueron a reinstalar el servicio, en dos poblados donde había habido cortes en represalias entre grupos”, explicó.