Aquella cena de febrero de 2020 fue conocida como un "pase de charola" porque se pidió a los empresarios comprometerse con la adquisición de boletos para la rifa alusiva al avión presidencial.
"Por medio de la presente manifiesto mi compromiso para participar de manera voluntaria en la compra de billetes de la Lotería Nacional, con motivo del sorteo conmemorativo que la misma llevará a cabo en relación con el avión presidencial, en beneficio de la asistencia pública, hospitales y adquisiciones de equipo médico", se leía en la carta de intención que se les entregó en la cena de aquella noche.
El presidente nacional de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), José Medina Mora, informó que sí se habló sobre los cachitos de lotería, y sobre el destino que tendrán los recursos.
“Son cachitos de 500 pesos, eso es lo que nos comentaron, como son tradicionalmente este tipo de sorteos que de alguna manera tendrán esa orientación específica de apoyo a estas obras de infraestructuras”, destacó.
En la cena también se abordaron proyectos de obra pública de Sinaloa, así lo confirmó el presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), Francisco Cervantes.
“Fue la presentación de los proyectos para Sinaloa, los proyectos de los macrolotes y de las presas, nosotros todo lo que tiene que ver con infraestructura para agua es lo que estamos apoyando”, dijo.