“La Suprema Corte declaró procedente o valido el decreto, porque también lo impugnaron, ahora de acuerdo al criterio que se está aplicando, no se toma en cuenta ese decreto”, explicó.
El Tren Maya, que se prevé sea inaugurado a finales de 2023, enfrenta una batalla legal, como en su momento sucedió con la construcción del Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles. Hasta octubre de 2021 tenía más de 25 amparos, a los que se han sumado cinco en contra del Tramo 5, que correrá de Playa del Carmen a Tulum.
El presidente insistió que detrás de esos amparos hay intereses económicos, sin embargo confió en que su obra continuará.
“Vamos a acudir a otra instancia o se van a presentar recursos para que no proceda el amparo porque no tiene fundamento, este es un asunto politiquero de quienes no quieren que se lleve a cabo la obra, son pseudoambientalistas, financiados por grandes empresas sobre todo de turismo, y también por gobiernos extranjeros”, refirió.
“La obra va a continuar, como no es mucho el tramo, aunque esté parada la obra, vamos a reiniciar y vamos a recuperar tiempo”.
Andrés Manuel López Obrador, presidente de México.
Inicialmente la obra estaba contemplada para ser finalizada en 2024, meses antes de que concluya la administración de López Obrador, sin embargo el presidente informó que se adelantaría su puesta en marcha para diciembre de 2023.