“¿Y qué no saben los ministros, porque son seres de otro mundo, de que esa reforma se aprobó con sobornos y que hay un juicio en contra del director de Pemex o, mejor dicho, que ese señor confesó que había entregado dinero a los legisladores para que se aprobara esa reforma energética? ¿Entonces eso no va a contar a la hora de decidir? ¿Puede más el poder de las empresas? Y que no me vengan a mí de que la ley es la ley, no me vengan con ese cuento de que la ley es la ley”, advirtió.
Ese mismo miércoles, el secretario de Gobernación, Adán Augusto López, visitó la Suprema Corte de Justicia de la Nación. A su salida se le preguntó si se había reunido con algún ministro, pero no realizó ninguna declaración.
Este viernes, el presidente descartó que desde su gobierno haya habido algún tipo de presión hacia los ministros.
"Nosotros no amenazamos, no compramos a nadie, nosotros tenemos principios, tenemos ideales" destacó.
Dijo que la visita del secretario se debió a que hace su trabajo. "Va a aclarar cosas de todo tipo es su trabajo, el secretario de Gobernación, debe mantener buenas relaciones con el Poder Judicial, con la Fiscalía, con el Poder Legislativo, tiene que hablar con gobernadores de todos los partidos".
Dos días después, el presidente los felicitó por resistir a fuertes presiones de diferentes actores políticos e incluso de gobiernos extranjeros.
"Ayer se resistieron fuertes presiones, estuvieron sometidos los ministros a fuertes presiones. De todo tipo, de todos lados”, aseguró.
El mandatario mexicano dijo que aunque su iniciativa de reforma eléctrica no sea aprobada, la Ley de la Industria Eléctrica le permitirá fortalecer a la CFE y cumplir con la promesa de no incrementar las tarifas de luz.