El presidente Andrés Manuel López Obrador describió como "un hecho histórico" la decisión de su homólogo de Estados Unidos, Joe Biden, de cancelar la construcción de un muro en la frontera común.
"Estamos muy de acuerdo en que se cancele la construcción del muro, este es un tema que celebramos porque el muro se ha venido construyendo desde hace algún tiempo", afirmó este viernes en su conferencia de prensa mañanera.
Este jueves 11 de febrero, Biden firmó una orden ejecutiva para eliminar la declaratoria de emergencia nacional en la frontera con México y, con ello, determinó cancelar la construcción del muro.
Al respecto, López Obrador señaló que los últimos cuatro presidentes de Estados Unidos habían construido una parte de ese muro en la frontera común. Con Bill Clinton fueron 100 kilómetros; con George Bush, 781; con Barack Obama, 22, y con Donald Trump, 386.
"Casi todos hicieron su tramo de muro. Ahora, el presidente Biden decide que ya no va a construir muro en la frontera; entonces, es un hecho histórico", afirmó.
Con la llegada de Biden a la Casa Blanca, López Obrador aseguró que su gobierno buscará que haya cooperación para el desarrollo, que permita generar oportunidades a ciudadanos del sur de México y de Centroamérica para que no dejen sus comunidades de origen.
"Nos van a querer seguir enviado helicópteros artillados, instrumentos bélicos; no, no queremos eso, queremos cooperación para el desarrollo", dijo.
El presidente, quien ya sostuvo dos llamadas telefónicas con Biden, consideró necesario que en Estados Unidos se resuelva la situación de los migrantes, para lo cual se pronunció a favor de que se otorguen visas de trabajo a mexicanos y centroamericanos.
"En vez de la ilegalidad por la migración como se ha venido presentando, puede buscarse un mecanismo de entrega de visas para trabajadores, normar todo lo que puedan ser los flujos migratorios", dijo.
Un cambio que se avecina con la llegada de Biden, señaló López Obrador, es que los ciudadanos que buscan asilo en Estados Unidos ya no tendrán que esperar en México la respuesta de ese gobierno.
"Tenemos alrededor de 6,000 migrantes esperando que les resuelvan en sus asuntos, sería conveniente que se cumpliera este acuerdo y que esperaran en territorio estadounidense", planteó.
