AMLO come pejelagarto con gobernadores, pero no logra sumar a todos al Insabi

Los gobierno estatales coordinan los sistemas de salud locales como centros de salud y hospitales y con el Insabi cederán su control a la Federación que busca que los servicios y medicamentos sean gratuitos con lo que se cerraría la entrada de esos recursos a las arcas estatales.

Antes de ingresar al encuentro, el gobernador de Michoacán, Silvano Aureoles, afirmó que, si bien para todas las autoridades es una prioridad atender la salud, aún están por reunirse con el director del Insabi, Juan Ferrer, para saber si firman el convenio de salud con el gobierno federal.

Por su parte, el gobernador de Oaxaca, Alejandro Murat, se pronunció a favor de la implementación de Insabi, pues comentó que encontró un estado con problemas en el sistema de salud.

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“Oaxaca va a sumarse al Insabi, nosotros recibimos un sistema de salud deteriorado totalmente, plazas sin suficiencia presupuestal, hospitales abandonados, así que la federalización de la nómina de salud sin duda lo vemos positivo”, refirió.

Alrededor de las 14:30 horas, los mandatarios fueron llegando a Palacio Nacional, donde el titular del Ejecutivo federal les ofreció una comida tabasqueña que incluyó pejelagarto .

Tras poco más de una hora y media de reunión en la que también estuvieron presentes miembros del gabinete federal, los mandatarios fueron abandonando Palacio Nacional y aunque todos coincidieron en que se trató de una reunión cordial, en la que el presidente les agradeció y pidió seguir trabajando juntos para sacar adelante México, aunque los de oposición se mantuvieron firmes en que no aceptarán adherirse al nuevo sistema de salud.

“No vemos la necesidad de adherirnos a un convenido porque el sistema de salud funciona en el estado, hay cosas que mejorar, pero funciona, en ese sentido lo que vamos a hacer es una propuesta los gobernadores de Acción Nacional de cómo se puede alcanzar esa universalidad y esa gratuidad a través del recurso que pueda aportar la federación en los estados, siempre en conjunto se puede llegar al objetivo”, afirmó Diego Sinhue, gobernador de Guanajuato.

Con él coincidió el gobernador de Chihuahua, Javier Corral, quien dijo que, si bien ya aceptaron firmar el convenio de coordinación con el Insabi, lo harán como un estado no adherido.

“Pero asumiremos varias, todos los deberes legales que están en la nueva ley general de salud, más las políticas de certificación y evaluación del Insabi”, indicó.

Por su parte, el gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro, puntualizó que así como lo ha planteado el gobierno federal es complicado que el estado se sume al convenio.

“En esas condiciones es muy difícil para nosotros firmar y apoyar esa iniciativa. Que esperamos que haya pronto reglas claras que se definan una serie de cosas que hoy no están definidas y queremos ayudar al presidente a que se den mejores servicios de salud y que se garantice la gratuidad también”, indicó.

Su homóloga, la gobernadora de Sonora, Claudia Pavlovich, comentó que, en el caso de su entidad, aún revisa la propuesta.

“Yo estoy analizándolo, lo más probable es que sí. El tema es trabajar todos en equipo y sacar adelante el tema de salud que es tan importante para el país”, sostuvo.

Con ella coincidió el gobernador del estado de México, Alfredo del Mazo, quien dijo que “lo ve con buenos ojos”.

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Sin asperezas

Por la mañana, en su conferencia de prensa el presidente López Obrador comentó que el primer encuentro del año con los gobernadores sería para brindarles todo el apoyo para trabajar en conjunto.

“Tengo una comida con los gobernadores, con todos, todos los gobernadores. Pero es de conversación sobre asuntos generales y para reafirmar nuestro compromiso de trabajar juntos, en armonía, sin pleitos, sin confrontación. Los gobernadores se han portado muy bien, han actuado con mucha responsabilidad, todos, y vamos a reafirmar ese compromiso; de parte nuestra brindarles todo nuestro apoyo para que sigamos trabajando juntos por el bien del país”, informó.

Al salir de su comida con el presidente López Obrador, los mandatarios estatales aseguraron que fue una reunión en la que se resaltaron los buenos propósitos.

“No tocamos ningún tema, porque era una comida de cordialidad, el presidente nos hizo el favor de invitarnos aquí nada más con los buenos deseos y los buenos propósitos, se han programado ya reuniones en el corto plazo con los gobernadores de las distintas fuerzas políticas de país”, refirió el mandatario de Baja California Sur, Carlos Mendoza Davis.