Al referirse al mismo tema, López Obrador sugirió que quienes han logrado retrasar la construcción del Aeropuerto de Santa Lucía, cuyas obras estaban proyectas para iniciar en junio pasado, deberían pagar una fianza.
“¿No tendrían que pagar una fianza por detener una obra, por los daños que se causan?, porque ya hay una demora, porque son daños a la nación”, cuestionó.
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Sin embargo, descartó que él pida ese resarcimiento; lo que sí, dijo, es que va a demostrar que quienes apoyaban la construcción en el Lago de Texcoco, estaban equivocados porque en realidad defendían "un monumento a la corrupción" y pese a ello, dijo, no hubo amparos ni protestas de ambientalistas.
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Comentó que tiene pruebas de que ese aeropuerto se estaba construyendo en la zona más baja y de mayor hundimiento en el Valle de México, de que el mantenimiento de esa obra iba a costarle al país muchísimo y que incluso afectaba a un vaso regulador de la ciudad.
“Puedo probar que tenían el interés de convertir en actual aeropuerto en una especie de Santa Fe para hacer negocios inmobiliarios”, agregó el presidente.
Recordó que cuando se concluya el proceso de amparos contra la construcción del aeropuerto, que forma parte de las megaobras de su sexenio, al día siguiente se iniciarán con las obras.
El pasado martes, el juez Quinto de Distrito en materia administrativa, Juan Carlos Guzmán, concedió la revocación de una de las siete suspensiones contra la construcción de Santa Lucía.