Apenas lleva siete meses como presidente y Andrés Manuel López Obrador suma nueve bajas en su equipo de trabajo. Tres de ellas de alto nivel.
Este martes Carlos Urzúa renunció a la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP). El ahora ex funcionario señaló en una carta, publicada en su cuenta de Twitter, que su retiro se debe a que en la actual administración se han tomado decisiones de política pública sin sustento alguno y apuntó a la “imposición” de funcionarios que no tienen conocimiento de la Hacienda Pública.
Tres de alto nivel
La renuncia de Carlos Urzúa de la secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) es la más reciente de las salidas de funcionarios del círculo cercano de Andrés Manuel López Obrador y la segunda en la que se dejan entrever diferencias dentro del gobierno.
Antes de Urzúa se presentaron las dimisiones de Josefa Ortiz, a la Semarnat, el 25 de mayo de este año. La exfuncionaria tuvo una circunstancia en un vuelo comercial y anunció su salida del gobierno tras darse a conocer el altercado.
Unos días antes, el 21 de mayo, Germán Martínez, anunció que dejaría la dirección del IMSS.
En su salida dio a conocer que había una “injerencia perniciosa” de funcionarios de la Secretaría de Hacienda en la operación del instituto.
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Seis renuncias más
También han renunciado al gobierno de la cuarta transformación otros funcionarios que encabezan institutos o direcciones. Entre ellos destaca Tonatiuh Guilén, quien dimitió al Instituto Nacional de Migración, y la de Guillermo García Alcocer a la Comisión Reguladora de Energía (CRE).
Otros funcionarios que se han bajado del barco son Patricia Burgarín a la subsecretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), Patricia Vázquez al INEE antes de que lo desaparecieran, Simón Levy como subsecretario de Planeación y Política Turística de la Secretaría de Turismo, y Clara Torres, quien se desempeñaba como directora de Políticas Sociales de la Secretaría de Bienestar.
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