La estrategia plantea aplicar procesos de mejora los servicios ecosistémicos en tres etapas. Entre 2025 y 2026, se pretende restaurar 50 sitios identificados como prioritarios por la Semarnat.
De 2026 a 2030 se llevará a cabo la restauración de otros 28 sitios, para sumar un total de 78 durante el gobierno de la presidenta Claudia Sheinbaum. Además, el Programa de Restauración plantea un camino transexenal, por lo que ha incluido la meta de continuar el trabajo hasta alcanzar 247 sitios restaurados en 2050.
La dependencia también creó la nueva subsecretaría de Biodiversidad y Restauración Ambiental para dar seguimiento a estas metas.
Ecosistemas degradados
Al presentar la estrategia, Alicia Bárcena, titular de la Semarnat, explicó que México es uno de los 17 países megadiversos en el mundo, con 12% de la biodiversidad global. Sin embargo, 5% del territorio está degradado. Se trata de 9.5 millones de hectáreas en condiciones extremas, señaló, que exigen una pronta recuperación o remediación ambiental.
Además, de 2001 a 2023, México perdió 5 millones de hectáreas de cobertura forestal.
“Somos parte integral de la naturaleza y por eso es una causa impostergable poder restaurar los ecosistemas y tener justamente ese derecho, restaurar ese derecho también a un medio ambiente sano”, subrayó.
“No es suficiente proteger a las especies de manera separada y, desde luego, mucho menos alejados de su medio ambiente natural. Lo que necesitamos es recuperar ese ciclo que se da en ecosistemas naturales como las selvas tropicales, como los manglares, como los bosques templados”, declaró.
Metas de restauración ambiental
El Programa Nacional de Restauración Ambiental 2025-2030 traza ocho metas principales de cara a 2020.
- Restaurar el 5% durante 2025 y el 30% en 2030 del total de superficie degradada de ecosistemas costeros y marinos, principalmente manglares.
- Contribuir al objetivo de lograr la deforestación cero neta para el año 2030.
- Restaurar 800 hectáreas de parques y bosques urbanos en 2025 y 1,500 hectáreas para 2030.
- Contribuir a la restauración de cuatro cuencas prioritarias al 2030: Tula, Lerma-Santiago, Atoyac y Río Sonora. Así como dos presas con decreto de restauración: Endhó y El Zapotillo.
- Restaurar 26,000 hectáreas de ecosistemas forestales en 2025 y 100,000 hectáreas al 2030.
- Garantizar que el 100 % de las acciones de restauración cuenten con participación, monitoreo y vigilancia comunitaria.
- Restaurar y decretar como Áreas de Prosperidad Marina 10 sitios deteriorados del Golfo de California al 2030.
- Contribuir a la reducción del 35 % de los Gases de Efecto Invernadero (GEI) al 2030.