Este martes 20 de mayo, dos colaboradores de la jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Clara Brugada, fueron asesinados en un atentado en la calzada de Tlalpan, en la alcaldía Benito Juárez.
La Secretaría de Seguridad Pública y la Fiscalía General de Justicia de la capital ya iniciaron con las indagaciones para esclarecer los hechos.
Lee más: ¿Quiénes eran Ximena Guzmán Cuevas y José Muñoz Vega, colaboradores de Brugada asesinados?
A lo largo de los últimos años, se han presentado diversos ataques en contra de funcionarios públicos o candidatos a un puesto político en México, en los que fallecieron la mayoría de las personas.
Estos son algunos de los casos de los últimos 15 años.
Rodolfo Torre Cantú, exdiputado del PRI y candidato del PRI para gobernador de su estado, Tamaulipas, fue asesinado el 28 de junio de 2010 a seis días para las elecciones.
Torre Cantú encabezaba la coalición “Todos Tamaulipas”, conformada por el Partido Revolucionario Institucional (PRI), el Partido Verde Ecologista de México (PVEM) y el Partido Nueva Alianza (Panal).
El candidato se dirigía hacia el aeropuerto Pedro J. Méndez para viajar a Matamoros para realizar el cierre oficial de su campaña electoral. Durante el trayecto, en el municipio de Soto la Marina, fue emboscado y asesinado a tiros a los 46 años.
También fallecieron Enrique Blackmore Smer, jefe de campaña y diputado local; Gerardo Sotero Subiate, David López Catache y Rubén López Zúñiga, quienes formaban parte de su equipo de seguridad.
Su secretario particular, Alejandro Martínez, y su cuñado Enrique de la Garza Mototo fueron heridos de gravedad.
A este asesinato se sumaron los de José Mario Guajardo Valera, candidato del Partido Acción Nacional (PAN) a la alcaldía de Valle Hermoso, quien falleció en marzo de 2010, y el del alcalde de Hidalgo, Marco Antonio Leal García, en agosto de ese mismo año.
Las elecciones a la gubernatura no fueron pospuestas tras el hecho y el Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del PRI designó a su hermano, Egidio Torre Cantú , como candidato sustituto, quien ganó las elecciones con el 61.58% de los votos en el estado, según cifras del Instituto Electoral de Tamaulipas (IETAM).
Gisela Mota Ocampo, del Partido de la Revolución Democrática (PRD), fue asesinada en un ataque armado el sábado 2 de enero de 2016, un día después de tomar posesión al cargo de alcaldesa de Temixco, en Morelos.
El ataque ocurrió cerca de las 7:30 horas en su domicilio en la colonia Pueblo Viejo, en Temixco, cuando entraron cuatro hombres armados quienes golpearon y dispararon a matar. Dos de los presuntos atacantes murieron luego de un enfrentamiento con los policías.
Graco Ramirez, entonces gobernador del estado, confirmó el asesinato, así como la detención de los autores del atentado. La Fiscalía General del Estado sentenció a personas a 45 años de prisión por su participación en el delito de homicidio calificado y señaló que también tendrían que pagar 730,400 pesos por el concepto de reparación del daño.
Gisela Mota Ocampo fue diputada federal del PRD en la LXII Legislatura, por la Cuarta Circunscripción, representando a Morelos. Presidió la Comisión de la Reforma Agraria y fue integrante de las Comisiones de Desarrollo Urbano y Ordenamiento Territorial, de Fomento Cooperativo y Economía Social y de Juventud. Murió a los 33 años.
Acosta Cano, diputado local del Partido Acción Nacional (PAN) y precandidato para la alcaldía Juventino Rosas, en Guanajuato, fue asesinado a balazos el martes 12 de enero de 2021 mientras se ejercitaba.
El entonces gobernador Diego inhue Rodríguez Vallejo, también del PAN, confirmó el acontecimiento y condenó el crimen.
Minutos más tarde, la Fiscalía General del Estado informó que se ordenó a la Fiscalía Especializada en Delitos de Alto Impacto y a un equipo de la Agencia de Investigación Criminal que investigaran el asesinato.
Acosta Cano contendía en el proceso interno del PAN como precandidato a la presidencia municipal de Juventino Rosas, una zona de influencia del Cártel de Santa Rosa de Lima. Murió a los 55 años.
Unos meses después, el director de Tránsito Municipal de Juventino Rosas, Juan ‘N’, fue detenido junto a otras dos personas por la Fiscalía General del estado por estar presuntamente relacionado con el homicidio de Acosta Cano.
Alejandro Arcos Catalán fue asesinado a seis días de asumir su cargo como alcalde de Chilpancingo, Guerrero. El cadáver del funcionario fue encontrado el 6 de octubre de 2024 en una camioneta en la colonia Villa del Roble.
Antes de él también asesinaron a Francisco Tapua, secretario del mismo ayuntamiento, confirmó entonces Alejandro Moreno, presidente nacional del PRI. Por su parte, Evelyn Salgado, gobernadora de Guerrero, condenó el asesinato e indicó que se trabaja para garantizar la paz en el estado.
El lunes 18 de noviembre, la Fiscalía General del Estado de Guerrero informó que el encargado de despacho de la Secretaría de Seguridad Pública de Chilpancingo, Germán Reyes Reyes, fue vinculado a proceso por el asesinato del alcalde de ese municipio; fue enjuiciado por el delito de homicidio calificado.
Omar García Harfuch, quien era secretario de Seguridad Ciudadana de la Ciudad de México, sufrió un atentado la mañana del viernes 26 de junio de 2020, en Lomas de Chapultepec, en la alcaldía Miguel Hidalgo.
Durante el atentado fallecieron dos escoltas de García Harfuch así como una mujer ajena a los hechos que pasaba por Paseo de la Reforma y Monte Blanco.
Además, varios domicilios resultaron con impactos de bala de grueso calibre. El secretario de Seguridad resultó herido.
En ese entonces, Harfuch atribuyó el ataque al Cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG). Se supo que el gobierno federal tuvo conocimiento diez días antes de que se realizara, según el entonces presidente Andrés Manuel López Obrador.
En marzo de 2024, un tribunal de enjuiciamiento concedió a la Fiscalía de la Ciudad de México sentencia condenatoria por 316 años de cárcel contra 12 presuntos integrantes del Cártel Jalisco Nueva Generación que participaron en el atentado.
El Laboratorio Electoral de México realizó un monitoreo de casos de violencia durante el Proceso Electoral Extraordinario Judicial, así como otros procesos de comicios locales en Durango y Veracruz.
En 2025, han registrado diferentes tipos de violencia, desde amenazas hasta asesinatos:
Procesos políticos locales
Dos asesinatos, de Carlos Ramses Neri Rodríguez y German Anuar Valencia;
Tres atentados;
Cuatro secuestros; y
Seis amenazas.
Procesos judiciales
El asesinato de Audel Arnoldo Hernández Solís;
Un atentado; y
Una amenaza.
