Pero las detenciones con López Obrador fueron 434% más que las notificadas en el sexenio de Felipe Calderón, que sumó 509,402, según datos de la Unidad de Política Migratoria de la Secretaría de Gobernación (Segob).
En las estadísticas oficiales se ha modificado la denominación para hacer referencia a las personas en movilidad que son detenidas y llevadas a estaciones migratorias. Les han llamado aseguramientos, presentación ante la autoridad, canalizaciones y eventos. En informes oficiales también le llaman "rescates".
Pero, en los hechos, se trata de una práctica de las fuerzas federales y el Instituto Nacional de Migración para detener, pese a no cometer un delito, a las personas extranjeras que cruzan el territorio sin documentos.
Cifras sin actualizar
A la fecha, no es posible conocer cuántas personas migrantes han sido detenidas en lo que va del sexenio de la presidenta Claudia Sheinbaum, debido a que el gobierno federal no ha actualizado las cifras desde hace seis meses. Los últimos datos disponibles datan de agosto de 2024.
En el portal web de la Segob se explica que esto se debe a una reestructuración: "Aviso al usuario: El dato de personas en situación migratoria irregular demorará en actualizarse debido a un proceso de reestructuración".
Sin embargo, sí se han actualizado otras estadísticas migratorias. El total de entradas de personas extranjeras cuenta con datos disponibles hasta diciembre, igual que las cifras sobre mexicanos devueltos por Canadá y Estados Unidos. Mientras que el registro de trámites migratorios llega hasta el mes de noviembre.
La cifra está sesgada porque los detenidos nada más los tenemos contabilizados hasta agosto y los documentados solamente hasta noviembre".
Lorena Cano, coordinadora jurídica en el Instituto para las Mujeres en la Migración (IMUMI).
La falta de datos sobre los eventos de detención en México genera incertidumbre en el contexto actual, cuando por segunda vez el presidente estadounidense Donald Trump presiona a México para frenar la migración irregular con el despliegue de militares.
En esta ocasión, los elementos de las Fuerzas Armadas no fueron enviados a la frontera sur, como ocurrió en el sexenio de López Obrador, pero sí a la frontera norte, donde 10,000 guardias nacionales y militares realizan patrullajes e instalan retenes para contener la migración y frenar el tráfico de drogas.
Durante el operativo denominado "Frontera Norte", que inició el pasado 5 de febrero a raíz de la pausa arancelaria, las fuerzas federales han detenido a 383 personas (hasta el miércoles), sin embargo, la autoridad no ha precisado cuántas son migrantes en condición irregular.
La realidad es que no existen cifras certeras oficiales de personas migrantes en México",
Lorena Cano Padilla, coordinadora jurídica en IMUMI.
Sin datos claros, se mantiene un discurso estigmatizante e irreal sobre el número de personas extranjeras irregulares o refugiadas en México.
"Esto es muy importante porque, cuando escuchamos 'ya son un montón de migrantes', 'aquí tenemos a nuestros propios pobres', pues no alcanzan a ser ni siquiera el 10% de la población total en México", expone.
"Nos hace falta en el país mucha empatía y mucha sensibilidad en el tema, pero a las autoridades les falta mucha preparación, mucha organización", agrega la especialista.
Bajan deportaciones
Pese al gran número de detenciones durante el sexenio de López Obrador, la cantidad de deportaciones que México hizo en ese periodo fue menor.
Según los datos oficiales, entre 2019 y hasta agosto de 2024, México expulsó 533,563 extranjeros, 26% menos que en la administración de Peña Nieto, que sumó un total de 727,674 deportaciones.
Pero respecto al gobierno de Felipe Calderón, la cantidad de expulsiones creció 13%.
Los tres sexenios tienen en común que expulsaron sobre todo a personas de Centroamérica, principalmente de Honduras, Guatemala y El Salvador.
En el sexenio de Peña Nieto se implementó, en 2014, el Programa Frontera Sur, en medio de la llegada sin precedentes de miles de infancias de Centroamérica que viajaban sin compañía y que en su momento Barack Obama, entonces presidente de Estados Unidos, calificó de crisis humanitaria. Esta iniciativa tuvo como consecuencia el incremento en el número de deportaciones y detenciones.
En 2018 se realizaron las primeras caravanas migrantes hasta que en 2019 llegaron las primeras presiones de Trump y la imposición del programa "Quédate en México". Así que las autoridades migratorias detuvieron a más centroamericanos durante ese sexenio. Unos años después se incrementó también la presencia de migrantes procedentes de Haití, países africanos, Venezuela y Colombia.