Sin embargo, la Secretaría de Salud tendrá un recorte si se aprueba este proyecto. Se estima que la dependencia pase de 96,990 millones de pesos a 66,693.20 millones de pesos, una disminución de 34.1% en términos reales.
Con este presupuesto previsto, el gobierno de la presidenta Claudia Sheinbaum mantiene la estrategia presupuestal que su antecesor Andrés Manuel López Obrador echó a andar en los últimos años de su sexenio y que consiste en una redistribución del gasto público del sector. La apuesta es otorgar más recursos a IMSS-Bienestar, encargado de los servicios de salud de las personas sin seguridad social, y disminuir el presupuesto de la Secretaría de Salud.
El PPEF 2025 también contempla bajar el presupuesto que el gobierno federal destina a los servicios de salud de los estados a través del Fondo de Aportaciones para los Servicios de Salud (FAAS) y que pasaría de 135,589.43 millones de pesos aprobados en 2024 a 81,220.40 millones de pesos para el próximo año. Esto corresponde a una disminución de 42.6% en términos reales.
La bolsa de Aportaciones a la Seguridad Social, dinero que proviene del Ramo 19, tendría una disminución real de 87.2%. En 2024 se le aprobó un monto de 74,226.46 millones de pesos y para 2025 se estima un presupuesto de 9,896 millones de pesos.
Los servicios de salud de las Fuerzas Armadas y de Petróleos Mexicanos (Pemex) también sufrirán un recorte. Los servicios médicos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), por ejemplo, pasarían de 8,009.37 millones de pesos aprobados en 2024 a 6,677 millones de pesos en 2025. Es decir, 20.1% menos en términos reales.