Familiares de los 43 normalistas desaparecidos y autoridades iniciaron este miércoles otra jornada de búsqueda en Iguala, Guerrero, la cual incluyó una visita al Campo Militar 35-C, sede del 27 Batallón de Infantería.
La búsqueda durará tres días. Concluirá el próximo viernes 2 de agosto. El objetivo es hallar evidencia sobre la participación de los militares en la desaparición de los estudiantes, de acuerdo con las familias.
La búsqueda fue ordenada por el presidente Andrés Manuel López Obrador, quien se reunió recientemente con padres y madres de los 43 normalistas.
A las instalaciones militares acudió un grupo reducido de familiares, pues los que están asesorados por el abogado Vidulfo Rosales Sierra decidieron no participar, pues creen que las evidencias en el Batallón ya fueron borradas hace tiempo.
Arturo Medina Padilla, subsecretario de Derechos Humanos, Población y Migración de la Segob, participó en la actividad de búsqueda.
“Como todos los días continuamos con las tareas de búsqueda de los normalistas de Ayotzinapa Guerrero. Hasta el último día de esta administración, trabajamos de sol a sol y con el compromiso y anhelo de encontrarles”, explicó el funcionario.
Elementos de la Fiscalía General de la República, la Comisión Nacional de Búsqueda, la Secretaría de la Defensa Nacional y la Comisión Nacional de los Derechos Humanos acompañan a las familias de las víctimas.
Los integrantes del Movimiento por Ayotzinapa han manifestado en los últimos meses que perdieron la confianza que tenían en el Gobierno de Andrés Manuel López Obrador.
Desde que fueron atacados los estudiantes, sobrevivientes denunciaron la participación del Ejército mexicano en los hechos de Iguala.
Aunque durante el Gobierno de López Obrador se liberaron órdenes de captura contra militares por el caso, el mandatario ha dicho recientemente que no hay evidencia que apunte a las Fuerzas Armadas.
Esta misma semana, Claudia Sheinbaum, virtual presidenta de México, anunció que su Gobierno buscará llegar a la verdad de lo que sucedió con los 43 jóvenes de Ayotzinapa la noche del 26 y madrugada del 27 de septiembre de 2014.
"Quedamos en seguirnos reuniendo, que no se nos va a olvidar el caso de Ayotzinapa y que vamos a seguir trabajando con ellos. Y vamos a encontrar un método de trabajo que nos permita lo que están pidiendo ellos, que es verdad, justicia y dónde están", afirmó.
