México levantó la voz contra la política migratoria de Texas. La Ley SB4, con la que cualquier autoridad local o estatal puede arrestar o procesar a quien sea “sospechoso” de haber ingresado irregularmente la frontera, fue rechazada por el Gobierno de México, por aspirantes a la Presidencia y por exfuncionarios federales quienes la calificaron de inhumana, injusta, violatoria y de contribuir a la criminalización de migrantes.
La a Suprema Corte de Justicia de Estados Unidos hizo válida la Ley SB4 de Texas, una de las políticas antimigratorias más duras de la historia de Estados Unidos. Con la entrada en vigor de esa legislación un migrante que ingrese o intente entrar a Texas desde México incurre en un delito. Si el migrante lo reintenta, se convierte en un delito grave, el cual amerita 20 años de prisión.
Además, da la facultad a la Policía y fuerzas de seguridad pública de Texas de detener a cualquiera del que se “sospeche” que ingreso de manera irregular y de expulsarlo de su territorio sin un proceso legal.