Esta organización se ha dado a la tarea de documentar la escasez de fármacos en el país. De acuerdo con datos de su informe más reciente, que se presentará el miércoles 31 de mayo, la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) ha recibido 16% más quejas por robo o falsificación de medicamentos. Mientras que en 2018 la dependencia recibió 26 reportes, en 2021 fueron 187 y el año pasado 218. Sin embargo, subraya la especialista, estos datos son apenas la punta del iceberg.
“Esto es una problemática que no es exclusiva de algún grupo de enfermedades, sino que está presente en todo tipo de medicamentos, para todo tipo de enfermedades”, apunta.
Expansión Política publicó que también se han incrementado las alertas sanitarias que Cofepris emite por la falsificación o venta ilegal de medicamentos, al pasar de cuatro en 2018 a 46 en 2022.
A decir de la también jefa de la causa de salud y bienestar en la organización Nosotrxs, esto refleja dos aspectos: que la Cofepris ha mejorado la identificación de los productos apócrifos y por ello emite más alertas; pero, también, que el mercado negro de insumos para la salud se expande en México.
“Hay todo un mercado negro que está produciendo medicamentos a consecuencia del desabasto, porque las personas los necesitan y en el sector público no se los brindan; y por la vía privada, no hay o sus precios son muy elevados. Así que se aprovechan de esto y terminan creando medicamentos falsificados que venden a más bajo costo”, advierte.
El problema es que faltan acciones específicas para combatir la venta ilegal de los medicamentos, que muchas veces ocurre por redes sociales o en tianguis.
“Si bien la Cofepris ha aumentado el número de denuncias, reportes y alertas, no es suficiente, porque yo no veo a nadie que en los tianguis los decomise o que lleve un control de eso. Hasta ahorita no ha habido una estrategia”, lamenta.