Jaqueline, de Honduras y quien cruzó caminando junto con un amigo de Guatemala, contó que migración detiene personas que intentan cruzar de forma irregular el río del Suchiate, profundo y con altos niveles de agua.
A pesar de estar en esta frontera sur, dijo que se quedará en Guatemala, ya que viajar a los Estados Unidos es complicado.
“Me dijeron que la entrada a los EU está cerrada y está lejos, no tengo dinero y ni trabajo para seguir”, abundó Jaqueline.
Los migrantes que llegan de los países de Ecuador, Venezuela, Honduras, El Salvador y de otras naciones, ingresan a todas horas por el río Suchiate en balsas y cruzan por los pasos el “Coyote”, el Limón, Palenque, Rojo, Armadillo, Cascajo, Lipa1 y 2.
En tanto, las autoridades migratorias mexicanas destinan esfuerzos para detener a los migrantes que logran burlar ciertos puntos de control.
Esta tarde, también se mantienen migrantes a las afueras del parque “Ecológico” de Tapachula, donde las autoridades determinaron dejar de otorgar los Formatos Migratorios Múltiples de 45 días para transitar por 45 días por territorio nacional.
Este flujo migratorio se da en medio del final del Título 42, que restringía el acceso a Estado Unidos por motivos de la pandemia de covid-19.
Mientras que volvió el Título 8, norma que históricamente ha regido la migración entre ambas naciones, a la par de su programa “CBP One” que plantea solucionar los trámites migratorios para ser internados a EU de forma regular.
El jueves Estados Unidos repatrió a México un total de 942 migrantes ante el fin de la política migratoria, mientras que en la frontera común se contabilizó la presencia de 26,560 migrantes.
El viernes, el canciller mexicano, Marcelo Ebrard, aclaró que México no recibirá a más de 1,000 migrantes al día deportados de Estados Unidos, pues no tiene la capacidad para atenderlos ni tampoco la voluntad de aceptarlo.