En la misiva Monreal expresó a su dirigente que una vez hecha la insaculación la metodología sería avalada por instituciones académicas y asociaciones profesionales de agencias de investigación de opinión pública.
En el texto volvió a gradecer a Delgado su inclusión como aspirante a la candidatura presidencial de Morena, misma que se concretó en carta que el líder morenista envió a los gobernadores de su partido para que inviten a los aspirantes a la postulación presidencial el pasado 15 de enero y les den trato igual.
Aunque con una tardanza de 18 meses en el líder de los senadores de ese partido consideró que con las reglas que propone se podría “nivelar la cancha”.
“Lamento mi incorporación tardía a un proceso que lleva 18 meses en curso. De todas formas, estoy en la mejor disposición de participar”, expuso.
Sus cuatro propuestas son “Convocatoria por consenso” que implique términos, plazos y reglas principales de la convocatoria, en los que se debe tomar en cuenta la opinión consensuada de los aspirantes.
“Por ejemplo, al acordar cuándo deben renunciar a sus cargos actuales; un mecanismo de resolución expedita de dudas y controversias; instancia de mediación para la atención de contingencias, etc. Todo ello, con la participación de los órganos de dirección y las instancias previstas por los estatutos de Morena”.
La segunda, la realización de una elección primaria para la definición de la candidatura presidencial pues “es una fuente de legitimación mayor que cualquier ejercicio demoscópico de gabinete, ya que ni las mejores encuestas (las que no están truqueadas) pueden sustituir al pueblo o a la realidad”.
Pero de no ser posible esa elección primaria, por el costo o por el riesgo de intromisión de otras fuerzas, debe realizarse una batería de cinco encuestas (tres como principales y dos como espejo), con una pregunta única.