El Servicio de Administración Tributaria (SAT) consideró que el Centro de Investigación y Docencia Económicas (CIDE) no cumplió con los requisitos para operar sin fines de lucro y ahora lo obliga a pagar impuestos como empresa privada.
Aquí cómo va el caso.
De acuerdo con el Informe de Resultados de la Cuenta Pública 2021, desde el 18 de enero de ese año, el SAT reclamó al CIDE por la omisión del pago de ISR mensual, correspondiente al periodo de enero a noviembre de 2020.
En ese periodo, cuando todavía era director del CIDE Sergio López Ayllón, el Centro inició una defensa ante el SAT para que respetara su carácter de organismo público descentralizado dedicado a la investigación, docencia y actividades académicas, funciones que lo exentaban de pagar impuestos.
“Obligación que no le corresponde y que se le atribuyó indebidamente de manera retroactiva”, se expone en el documento entregado en 2022 a la Cámara de Diputados.
Con base en su constancia de situación fiscal, el CIDE respondió al SAT que desde 2002 estaba inscrito en el Régimen Fiscal de las Personas Morales con Fines No Lucrativos.
Sin embargo, el SAT argumentó que con la reforma a la Ley del Impuesto Sobre la Renta, vigente a partir del 1 de julio de 2021, las asociaciones dedicadas a la investigación científica o tecnológica debían obtener la autorización para recibir donativos deducibles y poder tributar en el Régimen de Personas Morales No Contribuyentes.
Con este argumento, el SAT, que entonces estaba a cargo de Raquel Buenrostro, no aprobó la justificación del CIDE y le informó que debía presentar las declaraciones pendientes y, de ser el caso, pagar las cantidades correspondientes.
A través de un oficio, la Administración Central de Operación de Padrones de la Administración General de Servicios al Contribuyente agregó que el CIDE incumplió con el aviso anual de donataria autorizada y, por lo tanto, perdió ese estatus.
“La referida Administración consideró determinar la pérdida de la vigencia de su autorización como donataria, por incumplir con el aviso anual de las donatarias, por lo que se procedió a actualizar el régimen fiscal de la quejosa, asignándole las obligaciones correspondientes con efectos al 01 de enero de 2012”, se expone en el oficio que el SAT envió al CIDE.
El CIDE interpuso una queja ante la Procuraduría de la Defensa del Contribuyente (Prodecon) y esta dependencia solicitó al SAT pronunciarse al respecto.
En respuesta, el SAT indicó que, desde el 31 de diciembre de 2011, el CIDE fue dado de baja del Régimen de Personas Morales con Fines No Lucrativos.
Además, Prodecon informó, mediante un oficio fechado el 30 de noviembre de 2021, que en la Primera Sesión Extraordinaria de la Asamblea General del CIDE "se modificaron diversas disposiciones a su Estatuto general para adecuarlo a las nuevas disposiciones legales y solicitar la inscripción al régimen de contribuyentes pertinente".
Esa sesión se llevó a cabo el 14 de octubre de 2021, cuando José Romero Tellaeche ya fungía como director del CIDE.
Estudiantes y académicos del CIDE criticaron en redes sociales la decisión del SAT de exigir el pago retroactivo de impuestos a una institución dedicada a la investigación.
También consideraron que esto atenta contra la educación de calidad y agregaron que este cambio de régimen impedirá que los alumnos accedan a becas.
Lo que se le ha hecho al CIDE es precisamente eso que aparentan atacar: una reforma neoliberal. Más concretamente, atenta contra la educación de calidad, el acceso a igualdad de oportunidades y la posibilidad de movilidad social futura de muchos jóvenes. Mx 🇲🇽 lo va a lamentar.
— Jesús Soria-Narváez (@j_snarvaez) October 24, 2022
Además, señalaron que es un intento de privatizar y dejar al CIDE sin recursos.
Esta decisión del SAT suma a una serie de irregularidades que en el CIDE han vivido sus estudiantes y académicos con el actual gobierno.
