Cerca -pero no revuelto- estuvo Alejandro Moreno Cárdenas, conocido como “Alito”, quien después de posar para algunas fotos, se marchó para reunirse con organizaciones del PRI en Coahuila.
Antes de irse, el líder tricolor aseguró que él y todos están muy contentos con la alianza que llevó a Tere Jiménez al poder. “Está claro que la alternativa para México es Va por México”, señaló.
Su apoyo a las reformas a la Guardia Nacional, sin embargo, fue lo que provocó el distanciamiento con las dirigencias del PAN y PRD, las cuales siguen esperando que el tricolor tenga una renovación para ver si la alianza puede continuar.
“Nosotros confiamos en que corrijan y se apeguen a los compromisos realizados”, señaló el dirigente blanquiazul, Marko Cortés, en el evento de Aguascalientes.
Mientras tanto, en Tamaulipas, la toma de protesta de Américo Villarreal se convirtió en otro momento para medir los aplausos a las llamadas “corcholatas” de Morena.
Claudia Sheinbaum, jefa de Gobierno de la Ciudad de México; Marcelo Ebrard, secretario de Relaciones Exteriores, y Adán Augusto López, titular de Gobernación, se dieron cita temprano al evento que marcó el desenlace del mandato de Francisco Javier García Cabeza de Vaca.
Adán se sentó a unos metros de Américo. Desde ahí se mostró convencido de que junto a él, el pueblo tamaulipeco “dejará atrás el pasado y construirá su futuro de Transformación”.
Un poquito más lejos y grabando con su celular, se acomodó Marcelo Ebrard, quien aseguró que el nuevo gobernador tendrá mucho éxito.
Lo mismo Claudia Sheinbaum, quien destacó que el pueblo de Tamaulipas “decidió que ya era tiempo de un cambio verdadero”. De los tres, la jefa de Gobierno fue la que se llevó más aplausos.